El arzobispo de Rosario Eduardo Martín, dirigentes gremiales del Movimiento Sindical Rosarino y Aníbal Faccendini de la Cátedra del Agua manifestaron su apoyo al proyecto que busca declarar como personas al río Paraná y a los humedales.
Por tal razón, se reunieron este viernes en la sede del Arzobispado de Rosario donde después del encuentro el titular de la Cátedra del Agua, Aníbal Faccendini, expuso: “Nosotros lo estamos planteando y próximamente va a salir en el Concejo Municipal donde nos acaban de mencionar en una declaración muy importante e inédita en la Argentina”.
“Esta es una cuestión fundamental que tiene que ver con que plantear que sean personas, son sujeto de derecho, y si son sujeto de derecho es como si fuera una persona más como las personas humanas”, agregó Faccendini.
Después de considerar que ello constituye “un gran avance”, el integrante de la Cátedra del Agua señaló que la declaración servirá para progresar en las acciones orientadas a “evitar la quema de los humedales, las contaminaciones y fundamentalmente para lograr entender que nosotros comulgamos con la naturaleza, formamos parte de la naturaleza, constituimos y somos constituidos por la naturaleza”.
En tal sentido, Faccendini aclaró que hay antecedentes internacionales de tal declaratoria como lo son el río Atrato de Colombia, el Whanganui de Nueva Zelanda “con los originarios maoríes”, el Ganges y su principal afluente el Yamuna “y en conexión con todos ellos el Mar Menor en Murcia”.
Además, el docente universitario también le otorgó carácter de antecedente a la ley de protección de animales en Argentina que se sancionó en 1954 y que por ello “los animales fueron pasando a ser personas”.
“Era impensable en el siglo XVIII que alguien fuera condenado si trataba mal a los animales. Este proceso de análisis e investigación que hemos realizado es lo que nos permite ahora fundamentar la necesidad de todos y todas, de que el rio Paraná y los humedales sean personas”, razonó.
En cuanto al sentido práctico que traerá, Faccendini reflexionó: “Esto va a incrementar la conciencia, va a ayudar a que no haya quema en los humedales porque hay una cuestión fundamental y es que lo cultural tiene que prevalecer sobre lo legal”.
“Es impensable hoy que alguien esté maltratando a un perro en la calle cuando 50 años atrás era normal que, por ejemplo, le estén pegando a un caballo y nadie decía nada. Hoy esa persona es denunciada y un ejemplo muy concreto es que los humedales y el Paraná sean personas con el apoyo del Arzobispado, es fundamental que el Concejo así lo declare el 12 de noviembre como así nos dijeron”, subrayó.
La mirada gremial
Por su parte, el secretario general del Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario e integrante del Movimiento Sindical Rosarino, Alberto Botto, expuso: “Desde un primer momento nosotros nos hemos sumado ya que forma parte de la mirada que tenemos del gremialismo que no solamente tenemos que trabajar puertas adentro del sindicato, sino que nos tenemos que involucrar con los temas que son de preocupación general de toda la sociedad”.
“Cuando Aníbal nos convocó, que es un viejo luchador por este tipo de cuestiones, nosotros no dudamos y estamos sumando también nuestro esfuerzo para que esto sea una realidad, para que se terminen las quemas para que se protejan el río y la biodiversidad”, añadió.
Enseguida, estimó que “estas quemas van a tener un impacto bastante negativo en la población, más ahora que se vienen los meses de calor”, indicó, para agregar que “el calor que se absorbía en las islas” afectará con más intensidad porque “este año no estará ese colchón verde que absorba esa temperatura”.
“Y eso nos va a quitar calidad de vida a los rosarinos y a quienes vivimos cerca. Entonces, ¿cómo no sumarnos a esta cruzada y terminar de una vez por todas con este tipo de prácticas?, finalizó Botto.
