El Gobierno neuquino elevó a Nación un proyecto ejecutivo que contempla la restauración y reconversión de la hostería Ruca Malen, una de las obras más emblemáticas del Camino de los Siete Lagos por su carácter histórico.

Los equipos técnicos de la Unidad Provincial de Enlace y Ejecución de Proyectos con Financiamiento Externo (Upefe) presentaron el proyecto en el marco del Programa de Fortalecimiento de la Gestión Provincial que lleva adelante el Ministerio del Interior.

La directora provincial de Planificación de Proyectos Estratégicos de la Upefe, Cecilia Barrera, explicó que “el proyecto prevé la puesta en valor de los edificios patrimoniales del complejo y que vuelva a contar con el fin original».

«Se plantea una hostería, un edificio que es el más antiguo para funcionar como un museo del sitio y el tercer edificio, que es el que tiene menor antigüedad del conjunto, que sería el que albergaría la confitería y el restaurante, y además funcionaría un hostel en planta alta”, señaló la funcionaria.

Agregó que «se pretende revalorizar el lugar y poner en valor todo el territorio, con un circuito de recorrido y la arquitectura de época, ya que uno de los edificios se atribuye a Bustillo, y además se plantea que dentro de las salas se expongan historias del Parque Nacional Nahuel Huapi”.

Desde el Gobierno provincial informaron que la iniciativa de restaurar el complejo con cualidades arquitectónicas únicas se centra en proporcionar espacios museográficos, didácticos y de interpretación, así como miradores para contemplación del paisaje natural e instalaciones destinadas al senderismo y la observación de aves.

Asimismo, precisaron que el costo estimado de la obra sería de 220.442.826,22 pesos, y se desarrollaría en un plazo de ejecución aproximado de 14 meses, conforme al plan de trabajo desarrollado dentro del proyecto ejecutivo.

Ruca Malen llegó a ser un punto de referencia del turismo de alto nivel, ya que era costumbre que familias radicadas en grandes ciudades y de alto poder adquisitivo llegaran durante los veranos a la zona y se hospedaban en el lugar para descansar y contemplar el paisaje.

El complejo estuvo activo y cuidado desde la década de 1940 hasta la de 1980, y se encuentra ubicado sobre la Ruta de los Siete Lagos, a unos 30 kilómetros de Villa La Angostura, en el extremo norte del lago Correntoso.