El sociólogo Manuel Castells tiene claro que en la política contemporánea el poder se consigue y se ejerce a través de la comunicación. En su obra “Comunicación y poder”, Castells recuerda que “la política es el proceso de asignación de poder en las instituciones del estado”. Es decir, es a través de la política como se decide qué fuerza política consigue qué cuota de poder dentro del sistema institucional.

Así, explica que en los últimos años se produjo una “oligopolización mediática” que generó “la constitución de grupos de poder mediático que establecieron una relación de influencia extrema en el sistema político”.

“Los medios de comunicación grandes son el espacio donde se juega el poder, no es el cuarto poder. Es el espacio donde se juegan todos los poderes, y distribuyen las cartas del poder”, destaca Castells durante una conferencia.

En tal sentido, pone de relieve que “los medios importantes de comunicación no son aparatos ideológicos, utilizan ideología, pero son negocios. Ese es el objetivo de la empresa mediática, que es el mismo objetivo de toda empresa: ganar dinero”.

“Esa audiencia se utiliza para ganar dinero a través de la publicidad, y por otro lado ganando influencia por la audiencia que te permite negociar con los poderes políticos”, concluye.