Un informe de la OCDE puso a Argentina en el puesto número tres de los países de América Latina que mayores recursos destinan al área de Salud, justo debajo de Cuba (11,1%) y Brasil (9,6%). Argentina destinó el 9,5% del Producto Bruto Interno (PBI) en 2023, mientras que los años anteriores llegó a invertir el 10,9%.

Los números se desprenden del informe «Un vistazo a la salud: América Latina y el Caribe 2023», confeccionado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), un relevamiento que evalúa el rendimiento y el desarrollo de los sistemas de salud de los 33 países de Latinoamérica, agrupando un conjunto de indicadores sobre salud y atención médica.

Una de las conclusiones del relevamiento apunta a que, más allá de la inversión realizada en Salud tras el advenimiento de la pandemia de coronavirus, los sistemas sanitarios de la región deben prepararse mejor para hacer frente a las amenazas emergentes o arriesgarse a nuevos desenlaces con gran costo en vidas humanas. 

Por otra lado, el paper destaca que, en comparación de los restantes paìses de la OCDE, la región latinoamericana tiene un poco más de la mitad de los médicos cada 1000 habitantes (2,0 en ALC y 3,5 en la OCDE), la tercera parte de los y las enfermeras en promedio (3,5 en ALC y a 10,3 en la OCDE) y menos de la mitad de la capacidad de atención cuanto a camas de internación (2,1 en ALC y 4,3 en la OCDE).

Además, la esperanza de vida de la región latinoamericana sigue en ascenso, pero en una desigual distribución: aumentó 4 años desde 2000 y llegó a los 75,1 años en 2021, pero sigue estando por debajo de la media de los demás países de la OCDE de 80,4 años. Otro dato desalentador es que las mujeres viven 5,5 años más que la población masculina. Estos datos siguen mostrando a Latinoamérica como la región más desigual del mundo.

Los registros más altos de la esperanza de vida en los paìses latinoamericanos se observan en Chile (83,8 en las mujeres y 81,0 para los hombres) y Costa Rica (83,3 en mujeres y 80,8 en los hombres). Por otre lado, las más bajas se pueden ver en Haití (66,5 para las mujeres y 64,3 en el caso de los hombres) y en Guyana (73,2 para las mujeres y 70,0 para los hombres).

Según el informe, la causa más común de muerte fueron las enfermedades no transmisibles, las cuales explican el 77% de los fallecimientos registrados. Las más frecuentes fueron las enfermedades cardiovasculares -con 218 muertes por cada 100.000 habitantes en 2020, un 61% más que la media de la OCDE- mientras que la mortalidad por cáncer disminuyó en la región un 2,3% desde comienzos del milenio, pero lejos de la disminución promedio presentada por los países de la organización (15,4%).

Algo a destacar es el gasto privado en salud destinado por la población latinoamericana, el cual es más alto que en los países del resto del mundo en comparación. El promedio del año 2019 es que casi 1 de cada 3 personas (32,4%) debieron transferir ingresos al sistema de salud privada mientras que la OCDE apunta que el promedio en el resto del mundo fue de 2 de cada 10 personas.