A 40 años de la emblemática visita que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hizo al país en plena dictadura militar, una delegación del organismo llega mañana a Buenos Aires a modo de “homenaje a las víctimas» y en recuerdo de aquella inspección de 1979, que se convirtió “en un elemento jurídico clave para el proceso transicional de la Argentina”.
Así lo afirmó en una entrevista la comisionada chilena Antonia Urrejola, vicepresidenta segunda y relatora para Memoria, Verdad y Justicia, y pueblos indígenas de la CIDH, que integra la comitiva que llega mañana al país.
Recuerdo de los hechos
“El viaje que la CIDH realizó en 1979 a la Argentina fue de importancia para las víctimas del terrorismo de Estado en el país y para el desarrollo del Sistema Interamericano en cuanto a la promoción y protección de los derechos humanos a nivel regional”, destacó la comisionada.
Agregó además que esa visita “permitió echar luz sobre las graves violaciones de derechos humanos perpetradas como política de Estado por parte del régimen militar argentino para que la comunidad internacional prestara atención a esos crímenes” y, a su vez, se “transformó en un elemento jurídico clave para el proceso transicional de la Argentina”.
Entre el 6 y el 10 de setiembre de 1979, la CIDH recibió en el país 5.580 comunicaciones, de las cuales 4.153 fueron nuevas denuncias sobre distintas violaciones a los derechos humanos, según recuerda Urrejola.
Valentía por sobre el miedo
“La llegada de la Comisión se dio en un contexto en el que reinaba el miedo. Con la fuerza y la valentía que siempre los caracterizó, las víctimas y familiares supieron sobreponerse al fuerte rechazo y descrédito creado por la dictadura contra los integrantes de la CIDH y los organismos de derechos humanos, para dar su testimonio”, remarcó.
Con la visita de dos días que comienza mañana, que incluye un encuentro con el presidente Mauricio Macri, el viernes, la CIDH busca “recordar la misión de 1979, como una forma de honrar a las víctimas que tuvieron que atravesar los horrores cometidos por la dictadura; una manera de rendir homenaje a aquellos y aquellas valientes que lucharon de manera incesante, y que lo siguen haciendo hasta el día de hoy, por hacer justicia”, dijo Urrejola.
Diversas actividades
Entre las actividades previstas, mañana, a las 18 la delegación de la CIDH participará de un evento sobre “Violencia y discriminación contra mujeres, niñas y adolescentes” en la facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, mientras que el viernes, a las 10, participarán de la inauguración de una muestra en el museo del Espacio Memoria y Derechos Humanos, en la ex ESMA y se reunirán con organizaciones de derechos humanos.
“Los sitios de conciencia ponen de manifiesto las atrocidades que las sociedades quisieran olvidar. La ESMA representa lo que fue la política del terrorismo de Estado en Argentina. Algo que imagino que muchos quisieran poder enterrar y no tener que mirar porque avergüenza, duele, indigna”, concluye la integrante de la comisión.
