El ex candidato a presidente en las elecciones bolivianas de 2019, Carlos Mesa, fue el instigador del golpe de Estado que sufriera el ex presidente Evo Morales después de haber sido reelegido en dichos comicios.

Según consigna Luis Cruz para el portal plurinacional.info, el postulante de Comunidad Ciudadana (CC) convocó a movilizaciones bajo un falso discurso de fraude electoral que motivó el desconocimiento institucional y constitucional en el país.

La base de su argumento fue un pre informe de la Organización de Estados Americanos (OEA) en el que nunca se mencionó tal fraude, sino que estableció que en algunas mesas había habido “irregularidades”, hecho que nunca fueron respaldados.

Así, el 21 de octubre de ese año, Mesa dijo: “Queremos remitirnos a los cabildos que fueron clarísimos en decir que la sociedad boliviana no iba a reconocer un resultado manejado fraudulentamente como en este caso. Lo que los cabildos adelantaron se ha producido y lo que los cabildos establecieron es un desconocimiento de este fraude escandaloso (…)”

“Confiamos en que la ciudadanía no va a aceptar esta votación, no va a aceptar este resultado que está totalmente tergiversado y amañado”, indicó.

Más tarde, el 26 de ese mismo mes, el ex candidato del CC desconoció el resultado electoral y “las consecuencias políticas y jurídicas del mismo por ser éste el resultado del fraude y el incumplimiento de la voluntad popular”.

Por otra parte, Cruz revela que la ex directora de la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) Teresa Morales, en una entrevista con Ahora El Pueblo, recordó que el 29 de octubre Mesa, rodeado de su militancia, dijo: “¡Aquí estoy! O voy a la cárcel o voy a la presidencia”.

“Carlos Mesa convocó a la población a rebelarse contra el llamado fraude y se hizo un cabildo donde dijo: ‘Voy a ser presidente o voy a la cárcel’. Él fue quien estimuló, junto a otros golpistas como Luis Fernando Camacho”, sostuvo.

Morales también señaló que a eso se sumó el motín de la Policía Boliviana y el pedido de renuncia del presidente por el Alto Mando de las Fuerzas Armadas (FFAA), lo que fue efusivamente saludado por Mesa.

“En ese sentido es que Carlos Mesa, junto con los demás en cabildos, llamó a la rebelión y a no aceptar los resultados electorales para consolidar el golpe de Estado”, precisó Morales.

Añez como presidenta

Teresa Morales también develó que Mesa propuso que la entonces senadora Jeanine Áñez asuma la presidencia de facto.

Relató que en la tarde del 12 de noviembre, en la Universidad Católica Boliviana (UCB), Carlos Mesa, Jorge Tuto Quiroga, Samuel Doria Medina, Jerjes Justiniano, monseñor Eugenio Scarpellini y León de la Torre, de la Unión Europea, intentaron consensuar con el Movimiento Al Socialismo (MAS) una salida constitucional a la sucesión presidencial, pero que no prosperó porque ya habían acordado (ellos) un plan B: que Jeanine Añez sea presidenta.

“Ninguna salida llevaba a lo que ellos querían para instalar un gobierno. Con toda claridad, Carlos Mesa le preguntó a Adriana: ‘¿Qué le parece que Jeanine Añez fuera presidenta?’ Estaban sentados frente a frente, y Adriana le dijo: ‘Yo no entiendo por qué me preguntan si ya la señora Añez se está moviendo en la cápsula presidencial; seguramente ustedes habrán decidido cosas’”, recordó Morales.

Desligarse es el objetivo

El vocero presidencial Jorge Richter denunció que el jefe de Comunidad Ciudadana, en su afán de buscar impunidad por su participación en el golpe de Estado de 2019, intenta ahora posicionar la narrativa de que no fue un incitador y socio del régimen de facto de Jeanine Añez.

“Decir que se van a apoyar los juicios de responsabilidades por los delitos de corrupción es bueno, pero eso no lo exime o lo exculpa de la responsabilidad de participación que él (Mesa) ha tenido en el golpe de Estado como actor central de una de las secuencias que ha sido la amplificación del fraude, de esa narrativa de fraude que hasta el día de hoy no ha podido demostrar”, manifestó.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Diputados, Freddy Mamani, aseguró que por las investigaciones hubo un golpe de Estado y que por ello se probará que Carlos Mesa está comprometido porque fue uno de los que impulsó las movilizaciones que antecedieron a la ola de conflictos y a la represión militar.

“Para nosotros está totalmente claro que hubo golpe de Estado y estamos esperando los resultados finales del organismo internacional. (…) Mesa quiere lavar su imagen, no quiere aceptar que ha sido parte de todo este complot que ha pasado en nuestro país. Eso es lo único que le preocupa por el momento, porque la Justicia tarde o temprano le va a caer a toda esa gente que ha cometido delitos en nuestro país”, manifestó.

Entre otros hechos, también se registra que el 12 de noviembre de 2019 hubo una reunión en la Universidad Católica Boliviana (UCB) en la que se propuso que Jeanine Áñez asuma como presidenta.

De la misma participaron junto a Carlos Mesa sus asesores Ricardo Paz y Carlos Alarcón; Jerjes Justiniano, en representación del presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho; Samuel Doria Medina, jefe de Unidad Nacional (UN), acompañado de Roberto Moscoso; Jorge Tuto Quiroga y su asesor Luis Vásquez Villamor; monseñor Eugenio Scarpellini; León de la Torre de la Unión Europea (UE) y Juan Carlos Núñez, de la Fundación Jubileo.