El Tribunal Supremo de Justicia de Bolivia (TSJ) confirmó que seguirá presa en la carcel de Miraflores, en la ciudad de La Paz, por el caso "golpe de Estado II". Al conocer el fallo, Alain de Canedo, abogado Áñez, dijo que se "acabaron las instancias internas".
La Fiscalía la acusó de asumir la titularidad del Senado y, en consecuencia, la Presidencia de Bolivia en noviembre de 2019, sin cumplir requisitos constitucionales.
En una entrevista con periodistas durante su visita el sábado a la ciudad estadounidense de Orlando, el presidente brasileño insistió en sus ataques a la Justicia de su país.
Se reanudó el juicio tras que fuera suspendido a principios de mayo, cuando los abogados de la expresidenta de facto presentaron una demanda de inconstitucionalidad y La fiscalía "ya tiene preparada la presentación de los alegatos finales.
Al hacer el anuncio, la fiscal Lupe Zabala dijo durante la noche de este martes que Áñez está acusada de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución boliviana y las leyes, en el marco del caso 'Golpe de Estado II', que es la ampliación de caso 'Golpe de Estado I'.
La ex presidenta de facto de Bolivia se definió como mandataria “constitucional” y calificó de “mentiroso y vil ser humano” a su antecesor, Evo Morales. Su hija entregó la nota dirigida al titular de la OEA en la sede de la organización en Washington.
La expresidenta de facto Jeanine Áñez (2019-2020) podría recibir la pena máxima por delitos de lesa humanidad cometidos en el marco del golpe de Estado que derrocó al mandatario Evo Morales.
Varios miembros del Gobierno de facto que siguió al golpe y fue liderado por Jeanine Áñez -hoy detenida por la misma causa- se fugaron del país y buscaron refugio en el exterior para evitar ser arrestados por la Justicia boliviana en los últimos meses.
La ex presidenta de facto dijo que fue convocada por el opositor al gobierno de Evo Morales a una reunión, previa a la Asamblea en la que Áñez se declaró presidenta del Senado y se autoproclamó Presidenta del Estado.
El ex postulante a presidente por Comunidad Ciudadana en las elecciones de 2019 había convocado a desconocer el resultado electoral bajo la acusación de un fraude que nunca existió. Fue quien propuso a Áñez como presidenta y hoy pretende desligarse de esos hechos.
Se trata de Arturo Murillo, quien encabezara la cartera de Gobierno de la ex presidenta de facto boliviana, involucrado en la compra de gases lacrimógenos y en casos de lavado de dinero. Su jefe de Gabinete y tres ciudadanos estadounidenses también fueron arrestados por el caso.
La ex mandataria de facto iba a ser llevada en principio a una clínica para que se evalúe su estado médico tras empezar una huelga de hambre contra su detención e indicar que tiene hipertensión, pero un juez revocó ese traslado.