Al menos 27 combatientes de las fuerza del régimen murieron en el noroeste de Siria en un ataque nocturno de milicias rebeldes, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

En represalia, el régimen de Bashar al Asad y su aliado ruso lanzaron ataques aéreos y bombardearon con artillería los territorios rebeldes de la provincia de Idlib, matando a cuatro civiles, según el OSDH.

El ataque la noche del lunes fue contra dos pueblos y dos puestos de observación del régimen en la provincia de Latakia, cerca de la frontera con Turquía, continuó el OSDH. «Al menos 27 combatientes de las fuerzas del régimen y sus aliados, de los cuales ocho oficiales, murieron en enfrentamientos» y por disparos de artillería de los rebeldes, indicó a la AFP el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.

Los atacantes conquistaron un pueblo a dos kilómetros de la frontera turca y varios puestos de observación del régimen.

La ofensiva dejó más de 40 heridos entre las fuerzas del régimen. En la provincia de Latakia se encuentra la base aérea de Hmeimim desde donde operan las fuerzas rusas.

Diferentes milicias rebeldes ocupan un sector en el noreste, limítrofe con la vecina Idlib, provincia controlada por los yihadistas y los rebeldes.