Los líderes reunidos en Minsk para hallar una salida al conflicto armado en el este de Ucrania acordaron un alto el fuego que regirá a partir del próximo domingo y la retirada de armamento pesado, anunció el presidente ruso, Vladimir Putin.

«Hemos llegado a un acuerdo sobre lo importante», dijo el jefe del Kremlin, tras la cumbre en la capital bielorrusa, en la que participaron también los líderes de Ucrania, Petro Poroshenko; de Alemania, Angela Merkel; y Francia, Francois Hollande.

De acuerdo a lo anunciado, el alto el fuego comenzará a la medianoche del sábado (18 del domingo en Argentina).

Tras 15 horas de conversaciones en la capital de Bielorrusia, Putin dijo que se habían firmado dos acuerdos, uno declarando un alto el fuego y otro para implementarlo.

El presidente ruso explicó que las negociaciones fueron arduas y llevaron muchas horas debido a la negativa ucraniana de mantener contacto directo con los separatistas.

«Desgraciadamente, las autoridades de Kiev hasta ahora se niegan a mantener contactos directos con los representantes de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk», señaló el líder ruso.

«A pesar de que no están reconocidas, hay que partir de la vida real, y si quieren conseguir un acuerdo duradero y construir relaciones hay que mantener contactos directos», opinó.

Pese a los desacuerdos, los separatistas firmaron el documento en el Grupo de Contacto para Ucrania, la reunión en la que participan.

Putin agregó que el acuerdo contempla la retirada del armamento pesado desde la actual línea en la que se encuentran las tropas ucranianas y desde las posiciones que ocupaban los rebeldes en el momento de los acuerdos de Minsk (firmados septiembre).

Desde esa fecha, los separatistas han ido avanzando y se hicieron con el control de cientos de kilómetros cuadrados de terreno, por lo que la zona sin armamento pesado será más amplia de lo que se acordó en su momento.

«Partimos de la base de que todas las partes del conflicto ucraniano van a manifestar contención hasta el cese total de las hostilidades», subrayó Putin.

Poroskenko, por su parte, aseguró que «no fue nada fácil» alcanzar un acuerdo para el alto el fuego y un arreglo pacífico al conflicto en el este ucraniano.

«No fue nada fácil, de hecho se nos plantearon todo tipo condiciones inaceptables: concesiones, retiradas», dijo el líder ucraniano a la prensa al término de la reunión.

Subrayó que en las negociaciones, Ucrania «no cedió ante el ultimátum» e impuso su postura de que «el alto el fuego debe establecerse sin ningún tipo de condiciones previas».

Por su parte, Berlín emitió un mensaje en el que consideró que «hay esperanza». «Tras 15 horas concluyen las negociaciones en Minsk. Alto el fuego a partir de las 0 horas del 15 de febrero y entonces retirada del armamento pesado. Hay esperanza», anunció el vocero de la cancillería, Steffen Seibert a través de Twitter.

Mientras tanto, los combates no cesaron en la convulsionada región oriental de Donetsk donde al menos siete civiles murieron y otros 14 han resultado heridos por fuego de artillería, informaron las autoridades municipales de esta ciudad, principal bastión de los separatistas.