Manifestantes palestinos fueron reprimidos durante la noche de este miércoles por las fuerzas de seguridad israelíes, con un saldo de varios heridos de bala después de que se congregaran en la ocupada Cisjordania y Jerusalén Este, en solidaridad con los seis prisioneros que escaparon de una prisión israelí a principios de esta semana.

Alrededor de 400 palestinos participaron de las manifestaciones que también produjeron choques con las fuerzas israelíes en distintos puntos de Cisjordania, según la radio del Ejército, en el puesto de control de Hawara, al sur de Nablus, también en Hebrón, Belén, Ramallah, Anabta y Tubas, y el este de Jerusalén.

Dos palestinos resultaron heridos por balas de la Policía y otro por una granada paralizante durante los enfrentamientos en la Puerta de Damasco de Jerusalén, según la Media Luna Roja Palestina.

En la ciudad cisjordana de Beita, dos palestinos resultaron heridos por fuego real del Ejército de Israel, agregó la Media Luna Roja, según informó el portal ruso de noticias Sputnik.

En Hawara, al menos 100 palestinos fueron tratados por médicos de la Media Luna Roja, la mayoría de ellos por inhalar gas lacrimógeno por parte de las fuerzas israelíes.

En al menos un caso se informó que los manifestantes palestinos usaron fuego real contra los soldados israelíes.

En las últimas horas en las cárceles de seguridad de Ketziot y Ramón algunos presos palestinos quemaron sus celdas en medio del aumento de la tensión por las nuevas restricciones que se les han impuesto tras la huida de los seis prisioneros acusados de terrorismo.

Cinco de los fugitivos palestinos son miembros del grupo radical Yihad islámica y el sexto es un notorio jefe del partido laico Al Fatah.

Medios israelíes informaron que algunos presos de Yihad islámica están siendo trasladados para evitar nuevas huidas, por eso los motines y la violencia en las prisiones.