El presidente cubano Raúl Castro afirmó este martes que el diálogo con Estados Unidos «va bien», por lo que ambos países podrán designar embajadores, después que el país del norte retire a Cuba de la «lista de promotores del terrorismo», el 29 de mayo.

«En 45 días, que se cumplen el día 29 mayo, ya se levantará esa acusación y podremos tener y nombrar los embajadores», destacó Castro en alusión al plazo legal que debe cumplirse en Estados Unidos para que el presidente Barack Obama pueda eliminar a Cuba de esa nómina.

La Habana y Washington han celebrado tres reuniones sobre el restablecimiento de relaciones diplomáticas, rotas en 1961, pero Cuba ha exigido ser sacada de la lista negra terrorista de Estados Unidos antes de la reapertura de embajadas.

«Con eso el nombramiento de embajadores, extendemos relaciones, pero normalizar las relaciones ya es otro tema, pues para eso tiene que eliminarse el bloqueo completo (vigente desde 1962) y la base estadounidense de Guantánamo debe ser devuelta», declaró Castro a la prensa tras despedir en el aeropuerto de La Habana al presidente francés, François Hollande.

Castro destacó que Washington y La Habana están ahora discutiendo algunos temas pendientes para reabrir las embajadas, y mencionó entre ellos las restricciones de movimiento del personal diplomático.

«Le manifesté al presidente Obama concretamente, que lo que más me preocupa es que los diplomáticos estadounidenses continúen haciendo las cosas ilegales que hacen ahora, o que hanestado haciendo hasta ahora», indicó.

Mencionó como ejemplo la capacitación a «periodistas independientes, ya sea en la SINA (Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana, que cumple tareas consulares) o en casa de diplomáticos» estadounidenses en Cuba.

«Esas cosas no se pueden hacer. Sencillamente, lo que plantemos es que todos tenemos que ajustarnos a los acuerdos sobre el comportamiento de los diplomáticos en todo el mundo, aprobado en la convención de Viena de 1961», apuntó.

Tras notificar su decisión al Congreso, Obama está a la espera de que se cumpla el plazo legal de 45 días que tiene el legislativo de oponerse a la eliminación de Cuba de la lista terrorista, en la que también figuran Siria, Sudán e Irán.