El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, garantizó hoy «en nombre del presidente (Donald) Trump» que Estados Unidos «está firmemente junto a la Otan y cumplirá de forma inquebrantable» sus compromisos con la alianza transatlántica.
También urgió con vehemencia a sus socios europeos a aumentar de forma masiva el gasto de defensa. «Ha llegado la hora de hacer más», dijo ante medio millar de participantes en el foro anual de seguridad.
Los miembros de la Otan se comprometieron en 2014 a gastar por lo menos un 2% de su Producto Interior Bruto (PIB) en defensa hasta 2024.
Estados Unidos destina un 3,6% de su PIB, pero las cifras europeas están muy por debajo del objetivo a excepción de Reino Unido, Grecia, Estonia y Polonia.
En un discurso pronunciado anteriormente, la canciller alemana, Angela Merkel, se manifestó dispuesta a cumplir el objetivo del 2%, pero admitió que Alemania no está (ahora) en condición de incrementar el presupuesto de defensa en más del 8%.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, amenazó el miércoles en un encuentro con sus pares de la Otan en disminuir la contribución estadounidense si los aliados no presentan planes concretos para invertir más en su propia seguridad.
