El apagón sin precedentes que asoló Venezuela el pasado jueves 7 de marzo, fue tema de discusión en la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos que preside el republicano de Florida, Marco Rubio.

Allí, el cuestionado Elliot Abrams prometió que Estados Unidos hará “una transición pacífica” enVenezuela, a partir de infligir tanto sufrimiento económico al país para que el presidente Nicolás Maduro se vea forzado a presentar su renuncia al cargo.

Anteriormente, el vicepresidente del Consejo de las Américas ( institución controlada por la familia Rockefeller), Eric Farnsworth, había publicado en la revista national Interest que el único modo de derrocar a Maduro es oprimir a Venezuela “como hacen las anacondas que habitan las aguas venezolanas”.

¿Acaso es el apagón sin precedentes que afecta a 30 millones de venezolanos desde el jueves 7 de marzo es la respuesta a las afirmaciones de Abrams y los suyos?, se preguntan muchos, mientras que el ministro de Comunicaciones de Maduro, Jorge Rodríguez, dijo que el apagón se debió a un ataque “tecnológico y cibernético”.

Mientras tanto, la vicepresidenta Dalcy Rodríguez, responsabilizó en TeleSur a «grupos de extrema derecha» vinculados a la oposición y denunció que las «manos corrompidas» de políticos estadounidenses como el senador Marco Rubio han contribuido a crear las condiciones para un sabotaje tal.