Las históricas inundaciones ocurridas en Alemania y Bélgica han dejado más de 180 muertos y cientos de desaparecidos, además de haber devastado inmuebles y diferentes tipos de construcciones en varias ciudades de la región.

Según reportó Sky News, los trabajadores de emergencia todavía están buscando sobrevivientes, mientras que otros comienzan la enorme tarea de limpiar los escombros, con la esperanza de evitar más daños.

En ese contexto los pobladores siguen siendo advertidos sobre el peligro que existe por el probable colapso de diques que están asentados a lo largo de un río que se extiende desde Bélgica hasta los Países Bajos y que pone en alerta también a funcionarios alemanes.

“No todo está despejado”, expusieron, mientras que grandes partes de una presa cercana a Colonia, en la región de Renania del Norte-Westfalia, se han desprendido y hay una «enorme presión» sobre la estructura debido al alto nivel del agua, lo que representa un «riesgo grave» de ruptura de la presa.

La situación por la que atraviesa esta próspera región europea, pudo ser registrada en imágenes que muestran casas destruidas y negocios devastados. Un video de aristas asombrosas de cerca de Frankfurt muestra una casa entera siendo arrastrada por el río Ahr.

En otros lugares, los automóviles se volcaron, las redes eléctricas se cayeron y los edificios se derrumbaron cuando las inundaciones se precipitaron a través de pueblos como Schuld, al sur de Bonn, en el oeste de Alemania y por lo que miles de personas se han quedado sin hogar.