La producción industrial de Brasil acumuló una caída del 2,2 % durante el primer trimestre del año, en comparación con el mismo período de 2018, de acuerdo con datos difundidos hoy por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (Ibge).

Según el informe del Ibge, la caída del sector tiene como principal causa el freno de las actividades mineras, debido a la tragedia que en enero causó el colapso de una presa de residuos de la compañía Vale en el municipio de Brumadinho, al sudeste de Brasil, y que dejó 233 muertos.

«Los efectos a largo plazo de la tragedia de Brumadinho todavía se hacen sentir, con reflejos en las demás unidades extractivas del país», explicó André Macedo, gerente de la investigación citado en el informe.

En comparación con el último trimestre de 2018, la producción industrial tuvo una caída de 0,7 % entre enero y marzo de 2019, el peor resultado para un trimestre desde el registrado entre octubre y noviembre de 2016, según el Ibge.

En marzo de este año hubo un retroceso de 1,3 % en relación con febrero pasado, que eliminó el aumento del 0,6 % alcanzado el mes anterior por el sector, indicó la agencia de noticias EFE.

La producción automotriz, que había crecido 6,4 % en febrero, registró una caída de 3,2 % en marzo, mientras que la industria de alimentos tuvo una contracción del 4,9 % que eliminó parte del crecimiento del 13,8 % en el mes anterior.

Entre las grandes categorías económicas, los bienes intermedios entraron en el tercer mes consecutivo de resultados negativos con un reducción del 1,5 %.

Los bienes durables, con una caída de 1,3 %; y los semidurables y no durables, con un retroceso de 1,1 %, interrumpieron dos meses de crecimiento.

Sólo los bienes de capital tuvieron variación positiva de febrero a marzo (0,4 %), que supuso el segundo resultado positivo consecutivo para esa área.

La producción industrial en Brasil creció 1,1 % en 2018, lo que llevó al sector a cerrar con resultados positivos por segundo año consecutivo a pesar de una desaceleración en relación con 2017, año en el que se registró un avance del 2,5 %.