Más de la mitad de las pequeñas y medianas empresas alemanas prevé un deterioro de su negocio en los próximos seis meses, comunicó este sábado la asociación bancaria BVR y el banco DZ Bank.
Con base a un sondeo, las entidades detallaron que sólo una de cada diez de las más de 1.000 pymes encuestadas cree que su negocio mejorará en los próximos seis meses; y más de la mitad de las empresas (53 %) prevé un deterioro.
Según la encuesta, el aumento de los precios de la energía y el debilitamiento de la economía preocupan cada vez más a las pymes alemanas.
«En otoño de 2022, las pymes alemanas están al borde de otra recesión económica», explica el informe, citado por la agencia DPA.
«Sin embargo, la experiencia de los últimos años nos da esperanzas de que las pymes seguirán funcionando con éxito incluso en estas difíciles condiciones», continúa el análisis.
«El hecho de que las pymes en su conjunto no solo hayan sido capaces de mantener la calidad de sus balances en 2020 y 2021, sino incluso de mejorarla notablemente, a pesar de unas aguas económicas a veces muy turbias, es una fuente de confianza», agrega.
No obstante, las expectativas empresariales se deterioraron por tercer semestre consecutivo, esta vez en todos los sectores e independientemente del tamaño de la compañía.
BVR y DZ Bank señalaron que incluso en el punto álgido de la crisis financiera de 2007-2008, las expectativas no eran tan pesimistas.
Según el sondeo, sólo dos tercios (66 %) de las pymes tienen previsto invertir en su empresa en los próximos seis meses, porcentaje que no había sido tan bajo desde la crisis financiera.
El aumento de personal de los últimos años también se estancó, según el análisis, ya que en general, las pymes alemanas solo prevén un ligero aumento de su plantilla.
«El próximo freno de los precios de la electricidad y el gas debería (…) aliviar a empresas y hogares. Esperamos que este apoyo llegue a tiempo», indica una de las conclusiones de la encuesta.
