La marina libia anunció la creación de una zona de búsqueda y rescate de migrantes frente a sus costas en la que prohíbe el ingreso a buques extranjeros, en especial de ONGs.

Libia declaró «una zona de búsqueda y rescate (en la cual) ningún navío extranjero tiene derecho a ingresar, salvo pedido expreso de las autoridades libias», dijo el general Abdelhakim Buhaliya, comandante de la base naval de Trípoli.

Los guardacostas libios son criticados a menudo por los buques de las ONGs que patrullan frente a la costa de Libia para socorrer a los migrantes clandestinos.

Los traficantes aprovechan el caos que reina en Libia desde la caída del régimen de Muamar Gadafi, en 2011, para hacer que cada año decenas de miles de migrantes salgan del país con dirección a Italia, reclamándoles importantes sumas de dinero.

«Con este anuncio, deseamos enviar un mensaje claro a todos los que atenten contra la soberanía libia y falten al respeto de los guardacostas y de la marina», declaró el general Ayub Kacem.

«Deben respetar nuestra voluntad» y «obtener la autorización del Estado libio incluso para las operaciones de rescate», dijo dirigiéndose a las ONGs. Estos anuncios los realizaron las autoridades leales al jefe del Gobierno de Unión Nacional (GNA), Fayez al Sarrá, reconocido por la comunidad internacional pero que tiene dificultades para aplicar su autoridad más allá de Trípoli.

Este Ejecutivo había solicitado apoyo naval a Italia en julio para luchar contra las salidas de migrantes clandestinos desde las costas libias.