El ministro de Relaciones Exteriores británico, David Cameron, arribará este lunes a las Islas Malvinas como parte de una visita oficial que hará a países de Sudamérica y tras asegurar que la cuestión de la soberanía argentina en el territorio austral no es tema en discusión.

La visita, la primera de un ministro del gabinete británico al archipiélago desde 2016, se concreta después de que el Gobierno nacional renovó el llamado al Reino Unido para discutir el futuro de las islas.

Según un comunicado de la Oficina de Relaciones Exteriores, Commonwealth y Desarrollo, y del propio Cameron, la visita tiene múltiples objetivos, entre ellos mantener un encuentro con los habitantes de las Islas Malvinas para conocer de cerca su esfuerzo por construir una comunidad próspera y proteger el medio ambiente natural.

Allí buscará reafirmar el compromiso del Reino Unido con el derecho de autodeterminación de los isleños, un principio que se vio claramente reflejado en el referéndum de 2013, donde votaron a favor de mantener su estatus como territorio autónomo de ultramar del Reino Unido.

«Las Islas Malvinas son una parte valiosa de la familia británica y tenemos claro que mientras quieran seguir siendo parte de la familia, la cuestión de la soberanía no será tema de discusión», afirmó Cameron.

Durante su estadía, el ministro planea un homenaje al personal británico que sirvió y a aquellos que perdieron la vida en el conflicto de 1982, además de agradecer al personal militar del Reino Unido que se encuentra actualmente en las islas.

También se espera que Cameron visite proyectos relacionados con la conservación del medio ambiente y observe de primera mano a algunos de los millones de pingüinos que habitan el territorio.

La agenda de Cameron después de las Malvinas incluye visitas a Paraguay y luego participará en la reunión de ministros de Relaciones Exteriores del G20 en Brasil.

Finalmente, Cameron se dirigirá a Nueva York con motivo de la Asamblea de las Naciones Unidas.