Los neozelandeses votaron en contra de la propuesta de cambiar la bandera nacional, que el primer ministro calificó de «reliquia colonial», según los resultados preliminares publicados por las autoridades este jueves.

Según la comisión electoral neozelandesa, un 56,61% de los votantes se pronunciaron a favor del «No», mientras que un 43,16% eligieron el «Sí» a la nueva bandera, que lleva el helecho plateado de la selección de rugby.

Una victoria del «No» sería considerada como un revés para el primer ministro John Key, que impulsó el cambio para «modernizar el símbolo nacional», que considera «una reliquia colonial» del imperio británico.

El viceprimer ministro Bill English dijo que el gobierno puso en marcha un proceso democrático que da la posibilidad de decidir a los ciudadanos.

«Reconozco que va a haber quienes estén decepcionados con el resultado, pero la mayoría de los neozelandeses se ha pronunciado y tenemos que aceptar esa decisión», señaló en un comunicado.

Cerca de tres millones de papeletas fueron distribuidas en todo el país, que tiene 4,5 millones de habitantes. Unas 2,11 millones de personas votaron en el proceso.