El presidente de Estados Unidos Barack Obama recibirá al papa Francisco en la Casa Blanca el próximo 23 de setiembre, dando continuidad a las conversaciones que tuvieron en el Vaticano el año pasado.

«El presidente procura continuar esa conversación con el Santo Padre durante su primera visita a Estados Unidos como papa», afirmó la Casa Blanca en un comunicado.

Entre los temas que Obama pretende discutir con el papa Francisco se destacan la atención a los marginados y pobres, la protección de las minorías religiosas y la promoción de la libertad religiosa en todo el mundo, así como la recepción a inmigrantes y refugiados.

Francisco realizará una histórica visita a Estados Unidos este año, coronando así una lenta pero firme aproximación entre Washington y el Vaticano.

El 24 de septiembre, Francisco se convertirá en el primer papa en hablar ante el Congreso de Estados Unidos, un hecho que subraya la popularidad que el pontífice ha alcanzado en el país.

Francisco hablará en una poco usual sesión plenaria de ambas cámaras. En Estados Unidos, Francisco participará del Encuentro Mundial de las Familias, que se llevará a cabo del 22 al 25 de septiembre de 2015 en Filadelfia.

Finalmente, el 25 de septiembre, el sumo pontífice pronunciará un discurso ante la Asamblea General de la ONU, en Nueva York, que celebra en esa fecha su sesión plenaria anual. También se reunirá con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y con el presidente de la Asamblea, Sam Kutesa.

Cuando Estados Unidos y Cuba sorprendieron al mundo en diciembre pasado al anunciar el inicio de un proceso de reaproximación después de medio siglo de enfrentamientos, se conoció el papel central que el Vaticano y el propio Francisco tuvieron en ese proceso.

Tanto Barack Obama como Raúl Castro revelaron que recibieron cartas personales del Papa incentivándolos al diálogo, y que durante un año y medio los dos países mantuvieron contactos en discretas instalaciones facilitadas por la Iglesia Católica.