El presidente de Chile, Sebastián Piñera, reiteró este miércoles su “aprecio y gratitud” a los funcionarios de Carabineros y la Policía de Investigaciones (PDI) en medio de la mayor crisis política desde la vuelta de la democracia y las múltiples denuncias por abusos de los organismos de seguridad desde el estallido social iniciado el 18 de octubre.
En su discurso inaugural del Encuentro Nacional de Empresas (Enade) 2020, el mandatario defendió el desempeño de Carabineros y aseguró que “cuando salen a la calle es para proteger el orden público, la seguridad y la libertad y lo hacen muchas veces arriesgando su vida”.
Piñera dijo también que el país necesita una policía “moderna, eficaz y con legitimidad frente a la ciudadanía”, luego de las constantes críticas a las fuerzas de seguridad por su actuación represiva en las manifestaciones que se viven en el país desde octubre.
Cabe recordar que en diciembre la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos estableció que «hay razones fundadas para sostener que, a partir del 18 de octubre, se ha producido en Chile un elevado número de violaciones graves a los derechos humanos».
«Estas violaciones incluyen el uso excesivo o innecesario de la fuerza que resultaron en la privación arbitraria de la vida y en lesiones, la tortura y malos tratos, la violencia sexual y las detenciones arbitrarias», indicó entonces la ONU.
Respecto del actuar de Carabineros, el informe precisa que «ha incumplido, de forma reiterada, con el deber de distinguir entre manifestantes violentos y personas que se manifestaban pacíficamente».
«Carabineros utilizó fuerza no letal cuando la manifestación fue pacífica, con el objetivo aparente de dispersar la manifestación o evitar que los participantes llegaran al punto de reunión», señalaron las Naciones Unidas.
Reforma constitucional
Por otra parte, el mandatario también se refirió al debate sobre la reforma de la Constitución Nacional, afirmando que el texto en la actualidad genera división en el país y afirmó “hace mucho tiempo que la Constitución no es ese gran marco de unidad, sino que es el centro de la polémica”.
Ante ese debate, el jefe de Estado recordó que el gobierno ofrecerá garantías a la decisión que se imponga en el venidero plebiscito nacional, que será el próximo domingo 26 de abril, donde los chilenos responderán si quieren un nuevo texto constitucional y el órgano que redactará esta nueva Carta Magna, que pondría fin a la constitución que rige el país, creada durante la dictadura cívico militar de Augusto Pinochet (1973-1990).
Sobre el actuación del gobierno para enfrentar la crisis social que vive el país por diferentes demandas sociales, Piñera admitió que “sin duda hemos cometido errores, pero el país ha venido avanzando”.
“Chile, los chilenos y el gobierno cambió. La verdad es que yo creo que nadie anticipó lo que venía, ese estallido social y de violencia, que se desató a partir de esa noche fue algo que por cierto, yo no anticipé” evaluó.
El presidente, que posee los niveles de desaprobación más bajo de las historia del país, reveló que se sintió solo durante el inicio del estallido social, recordando que “en esos momentos estelares (crisis) es cuando la presidencia es una responsabilidad que pesa y es cuando se ejerce en solitario, eso ocurrió la noche del martes 12 de noviembre que nunca olvidaré”.
Para finalizar, el presidente Piñera reiteró que a pesar de la crisis “ha seguido imperando a plenitud el estado de derecho y las instituciones han funcionado con autonomía”.
