Rusia ya realizó un primer envío de armas tácticas nucleares a su aliado Bielorrusia, afirmó este viernes el presidente ruso, Vladímir Putin, quien aclaró que «no ve necesidad de usarlas» por el momento, en el marco de las tensiones geopolíticas por la guerra en Ucrania.

«Esto sucedió. Las primeras cargas nucleares se enviaron al territorio de Bielorrusia (…) Para finales del verano (boreal), para fin de año, completaremos este trabajo en su totalidad», dijo el líder del Kremlin durante el Foro Económico Internacional que se realiza en la ciudad de San Petersburgo.

Pese a este movimiento, Putin sostuvo que no desea recurrir a este tipo de armamento, algo que calificó como «negativo», y aclaró que estas armas solo serán utilizadas en caso de «amenaza a la integridad, independencia, soberanía y existencia del Estado ruso».

«Las armas nucleares fueron creadas para garantizar nuestra seguridad en el mayor de los sentidos, pero hablar de esto ya rebaja la posibilidad de que no sean utilizadas», aclaró antes de hacer hincapié en que «no existe esta necesidad», según informaciones reproducidas por la agencia de noticias Interfax.

Putin indicó además que Rusia «no reducirá su arsenal de armas nucleares», en medio de las tensiones con las potencias occidentales por la guerra en Ucrania, y destacó que Moscú «cuenta con más armas que los países de la OTAN».

«Lo saben y todo el tiempo tratan de persuadirnos para negociar y lograr una reducción», manifestó el mandatario, según reprodujo la agencia de noticias Europa Press.

El desarme nuclear de Bielorrusia se llevó a cabo de 1992 a 1996, y en el marco del proceso, una gran cantidad de armas fue destruida, mientras el resto fue enviado a Rusia.

El 25 de marzo pasado, Putin, anunció que Moscú y Minsk acordaron el despliegue de armas nucleares tácticas rusas en Bielorrusia, sin violar los compromisos internacionales.

Según el líder ruso, no se trata de un traspaso de armas nucleares a Bielorrusia, lo que supondría una violación del Tratado sobre la No Proliferación (TNP), sino de su emplazamiento, consignó la agencia de noticias Sputnik.

El presidente de Bielorrusia y uno de los mayores aliados de Putin, Alexander Lukashenko, alertó el martes pasado que «no dudará» en hacer uso de las armas nucleares que Rusia despliega en su país en respuesta a una eventual agresión.

«Dios no quiera que tenga que tomar la decisión de usar estas armas en tiempos modernos. Pero no lo dudaremos si hay una agresión contra nosotros», aseveró.

«La respuesta será inmediata. Ya lo he dicho varias veces antes», declaró Lukashenko, que, no obstante, confía en que no haya nadie que «quiera pelear contra un país que tiene un arma así».