Las zonas oriental y rural de Australia sufren desde la semana pasada una invasión de ratas que alarma a los pobladores por las enfermedades que puedan originarse, mientras los expertos advierten que puede incrementarse la llegada de roedores por las intensas lluvias en la región oriental del país.

Ciudades ubicadas en Nueva Gales del Sur “fueron literalmente invadidas por las ratas” y “al menos tres personas fueron mordidas por roedores dentro de hospitales”, según informó el diario británico Express online, citado por la agencia Ansa.

Los expertos advierten que la difusión de los roedores no hará más que empeorar en los próximos días.

Los agricultores de Nueva Gales del Sur señalaron “un drástico aumento” de la población de roedores, que fueron hallados en enjambres en silos de granos, casas y pajares.

Los expertos asociaron este fenómeno a las lluvias estivales que este año fueron insólitamente intensas en toda Australia oriental, luego de años de sequía.

Existe además alarma por la seguridad del agua potable, con advertencias -puntualiza la misma fuente- de esqueletos de ratas que terminan en los tanques.