Donald Trump pasa quizás por su momento más tenso al frente de la Casa Blanca, desde que asumiera en 2016. Es atacado por gran parte de la prensa, el arco político y el establishment norteamericano, e incluso se motorizan causas que buscan derivar en un juicio político que lo desplaze de Washington, con el «Rusiagate» como la más trascendente.

Quien salió en defensa del magnate fue Paul Craig Roberts, el ex Subsecretario del Tesoro para Política Económica durante el gobierno del Presidente Ronald Reagan.

«“Donald Trump fue el único candidato para Presidente que puso de relieve la necesidad de normalizar las relaciones con las otras grandes potencias nucleares. El complejo militar y de seguridad vio este compromiso como una amenaza a su enorme presupuesto y poderío y orquestaron el ‘Rusiagate’ para impedir que el Presidente Trump normalizara las relaciones con Rusia”, afirmó Roberts en un artículo para el Comité de Acción Política de Lyndon LaRouche.

Y añadió: “El ataque contra el Presidente Trump, dirigido por la CIA, ha contado con todo el apoyo de los demócratas y de la izquierda liberal, quienes agitan para llevar a juicio político al Presidente Trump, y quitar de este modo al único político con la cordura suficiente para ver el peligro que hay en las tensiones extremadamente altas entre Washington y Rusia”.

“Si la campaña de propaganda contra Trump tiene éxito, quienquiera que sea su sucesor en el cargo tendrá que mostrar hostilidad hacia Rusia, o sufrir la misma suerte. Por lo tanto, la conclusión razonable es que en este momento presente, las únicas personas que están entre nosotros y el Armagedón nuclear, son Donald Trump y Vladimir Putin”, cerró el ex funcionario estadounidense.