Este viernes por la noche, el conflicto entre el Ministerio de Defensa de Rusia y Yevgueni Prigozhin, líder del grupo Wagner, se intensificó con un intercambio de acusaciones. Esto ha llevado al fortalecimiento de las medidas de seguridad en diferentes regiones de Rusia y a la iniciación de un caso penal contra el líder de la empresa de seguridad privada.

La secuencia del conflicto comenzó cuando en un primer momento, Prigozhin acusó a la cartera de Defensa de lanzar un supuesto ataque contra una de las bases de Wagner en territorio ruso. En respuesta, el organismo restó toda credibilidad a las declaraciones de Prigozhin y catalogó como falso un video sobre la supuesta ofensiva.

Además, el líder de la empresa militar privada anunció lo que él llamó una «marcha de justicia» y se comprometió a responsabilizar al ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, y al jefe del Estado Mayor, Valeri Guerásimov, por sus acciones.

Putin resaltó en su discurso que «nos enfrentamos a una traición»

En un mensaje a la nación, el presidente ruso, Vladímir Putin, calificó las acciones de Prigozhin de «revuelta» y prometió tomar medidas contra los que se sublevaron contra el Ejército.

El comienzo del fuerte discurso expresó, «me dirijo a los ciudadanos de Rusia, al personal de las Fuerzas Armadas, de las fuerzas del orden y de los servicios especiales. A los soldados y comandantes que ahora están luchando en sus posiciones de combate, repeliendo los ataques del enemigo y haciéndolo heroicamente. Lo sé porque hoy por la madrugada volví a hablar con los comandantes de todas las direcciones. También me dirijo a aquellos que, mediante engaños o amenazas, han sido arrastrados a esta aventura criminal y empujados al camino del crimen más grave, el motín armado«.

 

En otro fragmento destacó: «No permitiremos que esto vuelva a ocurrir. Protegeremos tanto a nuestro pueblo como a nuestro Estado contra todas las amenazas. Incluida contra la traición interna.

Porque a lo que nos enfrentamos es precisamente a una traición. La ambición desmedida y el interés personal condujeron a la traición. Traición a su país, a su pueblo y a la causa por la que lucharon y dieron sus vidas los combatientes y comandantes del Grupo Wagner junto a nuestras otras unidades. Los héroes que liberaron Soledar y Artiómovsk, ciudades y pueblos del Donbás, lucharon y dieron su vida por Novorossiya, por la unidad del mundo ruso. Su nombre y su gloria también fueron traicionados por quienes intentan organizar la rebelión, empujando al país hacia la anarquía y el fratricidio. Hacia la derrota, y en definitiva, y la capitulación».