Por Hermes Lavallén

Las tierras raras son un grupo de elementos químicos con propiedades especiales que las hacen esenciales en la fabricación de una amplia gama de productos tecnológicos, como imanes de alta resistencia, baterías recargables, pantallas de televisores, catalizadores para refinerías y productos farmacéuticos. La dependencia de estas tecnologías ha aumentado en los últimos años, y se espera que siga creciendo en el futuro. A pesar de su nombre, las tierras raras no son especialmente raras en la corteza terrestre, pero son difíciles de encontrar en concentraciones lo suficientemente altas como para ser económicamente viables de extraer. La mayoría de las reservas de tierras raras se encuentran en China, lo que ha llevado a una preocupación por la seguridad de suministro y a una creciente necesidad de diversificación de fuentes.

Los principales minerales de tierras raras incluyen:

1. Bastnasita: Este mineral es uno de los más comunes de las tierras raras y contiene cerio, lantano y neodimio. Se encuentra principalmente en los Estados Unidos y China.
2. Monacita: La monacita es un mineral que contiene torio, uranio y elementos de tierras raras. Se encuentra en todo el mundo, incluyendo Brasil, India y Australia.
3. Xenotima: La xenotima es un mineral que contiene itrio y elementos de tierras raras como europio y terbio. Se encuentra en todo el mundo, incluyendo Brasil, China y Malasia.
4. Loparita: La loparita es un mineral que contiene titanio, niobio y elementos de tierras raras como cerio, neodimio y praseodimio. Se encuentra principalmente en Rusia y otros países de la antigua Unión Soviética.
5. Allanita: La allanita es un mineral complejo que contiene una amplia gama de elementos de tierras raras, incluyendo cerio, lantano, neodimio y ytrio. Se encuentra en todo el mundo, incluyendo Brasil, Canadá y Noruega.

En la República Argentina, la exploración y producción de tierras raras es relativamente nueva. Se han identificado yacimientos de tierras raras en varias provincias, incluyendo Buenos Aires, Chubut, Córdoba, La Pampa, Mendoza, Salta y Santa Cruz. Los estudios indican que la región de Salinas Grandes en la provincia de Salta podría tener un gran potencial de tierras raras, con concentraciones significativas de elementos como el litio, el potasio, el magnesio y otros minerales.

Además, la República Argentina cuenta con una importante infraestructura científica y tecnológica, con varias universidades y centros de investigación trabajando en la investigación y el desarrollo de tecnologías relacionadas con las tierras raras. Por ejemplo, la Universidad Nacional de San Martín, la Universidad Nacional de Córdoba y el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) están realizando investigaciones sobre la producción y el uso de tierras raras en diferentes aplicaciones. La necesidad de Argentina pasa por captar inversiones y desarrollar políticas públicas para enfocar el potencial del país en este ámbito. Una de las barreras para la explotación de estos recursos es la falta de conocimiento técnico y la necesidad de desarrollar tecnologías adecuadas para la extracción y procesamiento de tierras raras.

La guerra comercial entre China y Estados Unidos que empezó hace unos años ha puesto de relieve la importancia de las tierras raras y ha abierto una oportunidad para que los países de Latinoamérica desarrollen su industria de tierras raras y diversifiquen el suministro global.

A continuación, se presentan algunas tendencias y perspectivas sobre el futuro de las tierras raras:

1. Mayor demanda de tierras raras en tecnologías limpias: Las tierras raras son esenciales para la producción de tecnologías limpias, como turbinas eólicas, paneles solares y baterías de vehículos eléctricos. Con el aumento de la preocupación por el cambio climático y la necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, se espera que la demanda de tierras raras en estas tecnologías siga aumentando.

2. Mayor inversión en la producción de tierras raras: A medida que aumenta la demanda de tierras raras, se espera que la inversión en la producción y extracción de estos elementos también aumente. Esto podría llevar a la apertura de nuevas minas y al desarrollo de nuevas tecnologías de producción que podrían reducir la dependencia de ciertos países de las importaciones de tierras raras.

3. Investigación y desarrollo de alternativas a las tierras raras: Debido a que las tierras raras son elementos raros y su producción a menudo implica costos ambientales y sociales significativos, se está investigando activamente la posibilidad de desarrollar alternativas a estos elementos en la tecnología moderna. Algunas de las áreas de investigación incluyen el desarrollo de imanes sin tierras raras, la producción de paneles solares sin elementos de las tierras raras y la eliminación del uso de tierras raras en las luces LED.

Se espera que la demanda de tierras raras siga aumentando en el futuro debido a su papel esencial en la producción de tecnologías limpias y su amplia gama de aplicaciones en la tecnología moderna. Sin embargo, también existe la posibilidad de que se desarrollen alternativas a las tierras raras en el futuro.