Los niños con padres ansiosos están expuestos al riesgo de heredar ese problema, pero un estudio revela que un año de terapia familiar reduce la cantidad de niños que desarrolla ansiedad.

En general, «la ansiedad y el temor son sensaciones protectoras», pero eso no se aplicaría a los niños ansiosos «porque piensan que están ante un peligro o una amenaza cuando en realidad no es así», resumió a través de un comunicado de prensa la autora principal, Golda S. Ginsburg, del Centro de Salud de University of Connecticut, West Hartford.

Con su equipo estudió a 136 familias con por lo menos uno de los padres con trastorno de ansiedad y uno o más niños de entre seis y 13 años sin los requisitos clínicos de ansiedad.

Los adultos no tenían otros trastornos psiquiátricos, como las adicciones, por ejemplo.

Los autores organizaron a las familias en dos grupos: 70 en el Programa de Superación y Promoción de la Tolerancia y 66 en un grupo control.

El primer grupo participó de ocho sesiones semanales de una hora con terapeutas entrenados: las dos primeras para los padres solamente y, luego, seis sesiones con todos los integrantes de la familia interesados en participar.

Los terapeutas se concentraron en los factores de riesgo modificables, como el modelado parental del control o la sobreprotección, y les enseñaron a los padres y a las familias a identificar los signos de ansiedad y cómo reducirlos.

Además, los adultos aprendieron a ampliar la autonomía y la independencia de los hijos. El grupo control recibió un folleto de 36 páginas sobre los trastornos de ansiedad y sus tratamientos, pero ninguna sesión terapéutica.

Al año, el 31 por ciento de los niños del grupo control había desarrollado ansiedad, comparado con el 5 por ciento del otro grupo, según publica el equipo en American Journal of Psychiatry.

Muchos factores determinan si un niño desarrolla o no ansiedad, incluidos los genes y el entorno, según comentó Ginsburg por correo electrónico.

La ansiedad grave es el trastorno psiquiátrico más común en los niños y los adultos. El 5 por ciento de los niños reúne los requisitos clínicos del trastorno de ansiedad, de acuerdo con Jennie Hudson, especialista en salud emocional de la Universidad Macquarie, Sídney, Australia y que no participó del estudio.

«Además de la herencia, los niños aprenden mientras miran a los otros, incluidos sus padres», finalizó Hudson.

FUENTE: The American Journal of Psychiatry, online 25 de septiembre del 2015