Hace exactamente dos meses el ex concejal de Rosario Eduardo Trasante fue asesinado en su domicilio de San Nicolás 3.638. El pastor de 55 años murió por un disparo de arma de fuego en la cabeza y una mano, cuando dos personas ingresaron a su vivienda, en la que también se encontraba su mujer y su hija.
Ante el crimen, desde el espacio político al que pertenecía Trasante, pidieron el esclarecimiento del hecho frente a la sede de Gobierno de la provincia. El concejal por Ciudad Futura Pedro Salinas, afirmó en diálogo con Conclusión que “el crimen de Eduardo no es uno más, no porque una vida valga más que otra. Este asesinato tiene una gravedad institucional muy grande, inédita desde la vuelta de la democracia”.
“Eduardo fue un símbolo de la lucha por justicia, es un mensaje político mafioso. Por eso, develar quién mató a Trasante es develar el nudo de mafias y complicidades que gobiernan fácticamente en esta ciudad y esta provincia”, expresó el edil.
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A su vez, pidió mayor compromiso por parte de la administración santafesina: “El Gobierno provincial se llamó a silencio, un silencio que cuando se prolonga se parece a la complicidad. Hoy pedimos a las autoridades que reaccionen porque si no lo hace puede ser muy tarde. Los funcionarios están a tiempo de romper con ese silencio”.
“El pedido es de la familia de Eduardo, que al día siguiente del homicidio tanto el intendente como el gobernador se comprometieron a recibirlos. Entonces estamos pidiendo que se retome esa agenda de reuniones. Las autoridades lo que tienen que hacer es comprometerse con el caso y reparar a los familiares de Eduardo. En estos dos meses lo único que tenemos es silencio”, enfatizó.
La causa
Dos personas fueron imputadas por comprar el auto utilizado y trasladar en el mismo a los sicarios que ejecutaron al pastor. Los fiscales Matías Edery de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos y Gastón Ávila, de la Unidad de Delitos Complejos imputaron a Brian Nahuel A. y Aníbal Maximiliano G. por haber comprado el Peugeot 308 Allure modelo 2012, que fue robado en una entradera en la zona sudoeste de la ciudad días antes del crimen. Por el robo del vehículo, fue imputado Ariel Hernán S.
Los fiscales no descartan que los imputados hayan tenido otra participación más activa y adelantaron que hay varias pistas que indican que la orden de acabar con la vida del ex edil partió del penal de Piñero.
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Sobre el avance de la causa, el edil comentó: “La causa está prácticamente estancada, la última novedad fue la que denunciamos hace un mes por el intento de plantar un testigo falso, a partir de lo cual se pretendía cerrar la investigación en dos perejiles. Desde el equipo de abogadas de la querella pudieron advertir que el chico estaba practicamente guionado. Nos gustaría saber quién fue el que lo mandó. Y planteamos la denuncia por falso testimonio”.
En cuanto a la violencia en la ciudad, Salinas analizó: “Estamos viviendo un momento muy difícil. Los niveles de violencia son muy alarmantes. Lo que hay que hacer es convocar a los espacios políticos a una mesa de trabajo para crear un plan integral contra la inseguridad. Difícilmente la violencia pueda resolverse en un escritorio, ni con el mejor intendente o gobernador. Lo que está en disputa en la ciudad es si gobiernan las mafias o la democracia”.
