Con gran expectativa y desde bien temprano, gran cantidad de rosarinos fueron testigos esta mañana de un acontecimiento histórico para la ciudad. Es que como estaba previsto, hoy aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Rosario «Islas Malvinas» el avión Antonov AN-124 «Ruslan», el segundo más grande del mundo.
Cuando el reloj marcaba las 8.42, las enormes cuatro turbinas redoblaron el trabajo en el descenso y el sonido ensordecedor causó asombro entre los presentes.
El Antonov AN-124 “Ruslan” estará en el aeropuerto local enclavado en Fisherton hasta el próximo lunes a las 14, cuando vuelva a encender sus turbinas para emprender el regreso al Viejo Continente.
El avión que se desarrolló en la antigua Unión Soviética arribó a Rosario trayendo un generador para la usina termoeléctrica “San Martín”, ubicada en la vecina localidad de Timbúes. El rotor que llegó pesa unas 66 toneladas y mide unos 12 metros de longitud, según dijo Ariel Stechina, uno de los referentes de la termoeléctrica de Timbúes presente en el aeropuerto.
El traslado será a través de un carretón con varios ejes y varias ruedas, será lento y el rotor descenderá del avión a través de una enorme grúa.
Según le confió a Conclusión Raúl Garo, presidente del directorio del aeropuerto, este avión creado en tierras ucranianas ya visitó la ciudad en el año 1998. Fue un 24 de abril, cuando el AN-124 pisó suelo rosarino procedente de Luxemburgo. Partió de regreso un día después, según las crónicas de la fecha, y fue un atractivo para miles y miles de turistas.
Así, desde hoy y hasta el lunes este enorme avión, el segundo más grande del mundo, será otra atracción para disfrutar en la ciudad.
