La titular del PRO, Patricia Bullrich, continúa recorriendo el país fortaleciendo su precandidatura presidencial. Al referirse a la posibilidad de gobernar, la ex ministra de Seguridad aseguró que cambiaría las leyes para que el Ejército «pueda acompañar» la lucha contra la inseguridad y el narcotráfico y que utilizaría «las herramientas del Estado» para combatir a las organizaciones criminales que operan en Rosario.

Al referirse a los altos índices de criminalidad de la ciudad, Bullrich sostuvo que desde su espacio vienen «alertando sobre todo lo que está pasando».

«Es necesario desarmar este modelo de cuajo. Estoy absolutamente convencida de, si me toca gobernar el país, primero ir a Rosario con todas las fuerzas federales. También estamos pensando en cambiar las leyes para que el Ejército pueda acompañar, y de esa manera utilizar las herramientas del Estado para el combate de esas organizaciones, que además son de un nivel de violencia inusitada», agregó en diálogo con Radio Continental.

Al analizar los índices crecientes en Rosario, la titular del PRO aseguró que es el resultado de la pérdida de poder que sufrieron las fuerzas armadas en los últimos años: «Todo esto tiene que ver con una policía que está de brazos caídos. Cuando la policía siente que no tiene ningún tipo de ayuda del poder político, que si pasa algo, que si se tirotea va a terminar siendo el responsable, que no tiene quién entienda su lógica, va a terminar de esta manera».

«Es importante apoyar a aquellos que son los que están llevando adelante la lucha contra el delito todos los días. Lo mínimo que nosotros necesitamos es que la policía esté más dotada y tenga mejores armamentos que los delincuentes. Esto es la base», siguió.

Además, Bullrich alertó sobre la posible entrada al país del Primer Comando Capital (PCC), una organización criminal que opera en Brasil y Paraguay.

Según la ex ministra, el PCC ya registró actividad en el territorio nacional y está vinculado al robo de avionetas destinadas al narcotráfico.

“Hay que tener una política común con otros países, impedir que entre el PCC es algo fundamental. En solo tres años se revirtió todo lo bueno que habíamos hecho en la lucha contra el narcotráfico. Ahora habrá que tomar esto desde mucho más abajo, la tarea va a ser más difícil”, planteó.