Por Santiago Fraga

Más allá del poco tiempo que resta para que se den las primeras elecciones del año, la realidad social y política que atraviesa constantemente Rosario y la Argentina siempre se merece un espacio para su tratamiento, análisis y debate.

En este contexto, de cara a este 2017 surgió una iniciativa más que interesante, que ya ha tenido éxito en sus primeras intervenciones y continuará desarrollándose. Todos los martes a la noche, en el bar Let’s Dance (Callao y Güemes), desde el espacio El Hormiguero se organizan charlas-debates sobre distintos tópicos del ámbito local, nacional y mundial.

“Es fundamental que haya espacios así donde la gente pueda debatir. Son espacios sociales donde construimos acuerdos y limamos asperezas”, aseguró Fabio Primo, coordinador de las charlas, en diálogo con Conclusión. En este sentido, también contó: “muchas veces las discusiones que hemos planteado en el espacio han servido para que referentes de distintos movimientos sociales discutan sus diferencias y por lo menos han llegado a acuerdos básicos de posicionamiento”.

Los martes es un día generalmente difícil para generar convocatoria, pero el interés de la gente por las temáticas que los afectan ha bastado para que haya una buena concurrencia en la distintas charlas que han ofrecido. Los debates han ido desde “los feminismos frente a la violencia de género”, “la problemática de la cultura en Rosario”, la “agricultura sin agricultores” y la “política educativa neoliberal” hasta un debate de concejales por el endeudamiento municipal, sobre el papel del pueblo en la revolución de Mayo y “el mundo según Trump”.

A la hora de hablar sobre las temáticas que se escogen, Primo sostuvo que no se busca sólo hablar de la política local, sino darle importancia también al ámbito nacional. “Me parece que tiene que ser un elemento de coagulación de un sector amplio que se posiciona en una oposición, pero también hay darle lugar a temáticas de interés que tienen que ver con la coyuntura, como la charla de Rolandelli sobre Trump, que tiene que ver con otras cuestiones que nos afectan de otra manera y que es de interés porque no hay muchas charlas sobre geopolítica, como podría también haber una charla sobre Venezuela o sobre Brasil”, agregó.

Por esto es que se van tomando temas de actualidad y allí eligen gente idónea para abordar esos distintos tópicos, cuyas conclusiones, además de quedar en las cabezas de los presentes, luego se difunden a través de un programa en Radio Universidad.

“Se está intentando un espacio amplio donde el micrófono esté abierto para todos, donde se traten todos los temas, y por fuera de lo partidario. Este es un espacio amplio. Puede venir cualquiera y acá vale la opinión de todos”, dijo Fabio Primo.

“No hay una opinión unívoca, ni se trata de ver que mi idea política es mejor que la del otro o que nunca me equivoqué, sino superarnos”, agregó Nelson Lutsch, miembro de la JUP, creadora del espacio El Hormiguero. “Es una iniciativa que decidimos darle valor y apoyarlo como un hecho cultural, donde se abordan temas de la realidad y temas políticos y buscar acordar en temas generales, en los temas importantes”, concluyó.

En cuanto al espacio donde tienen lugar estas reflexiones, Let’s Dance desde hace varios años realiza charlas-debate cuyas temáticas iban mutando de acuerdo a la naturaleza de cada una de ellas.

“Con el gobierno anterior había un ciclo donde se hablaba específicamente del extractivismo o de la ecología, que era en su momento nuestra oposición o nuestra lugar de insistir con determinadas políticas que no estaban aplicadas y que nos parecían preocupantes”, ejemplificó Hernán Franicevich, uno de los encargados del lugar.

Con el pasar del tiempo y ya desde la previa a las últimas elecciones presidenciales, las charlas han cambiado en función de lo candente a la política y el rumbo al país en cuanto al modelo. “Ahí empezamos a ver que había muchos temas que se iban abriendo y fuimos armando charlas en función a lo que iba pasando”, contó Franicevich.

Aquel ciclo se realizaba los miércoles, pero para este año la propuesta fue de realizarla los martes para darle una agenda semanal completa y que todos los martes funcione una actividad en el bar. Ahí apareció El Hormiguero como espacio, luego aparecieron los temas, las ideas, las personas, las reflexiones y finalmente los acuerdos.