Es notorio que desde hace unos años, la actividad náutica aumentó en un gran porcentaje; y con ello, la visita a las islas frente a Rosario, de cientos de personas cada fin de semana. Este año, los precios establecidos para el pasaje que permiten cruzar (y luego retornar) subieron casi un 10%.
Uno de los sitios más concurridos, es la salida desde la Estación Fluvial al banquito San Andrés (más conocido como “Vladimir”). Cientos de personas se acercan cada fin de semana para disfrutar de esa zona, la cual cuenta con un banco de arena amplio, con lo cual es uno de los sitios preferidos de aquellos a quienes no les gusta “pisar barro”. A partir del 1 de noviembre, visitar esta isla cuesta 85 pesos. Es la “entrada” más cara entre todas las opciones isleñas.
Las lanchas que brindan este servicio, que salen desde las inmediaciones del Monumento a la Bandera, tienen una frecuencia de partida cada una hora de lunes a viernes; en tanto, los fines de semana el horario es cada 30 minutos. Por ahora, hay una sola embarcación afectada al servicio, pero conforme avanza la temporada llegan a seis y comienza su jornada a las 10.
En los paradores ubicados frente a esta franja, esperan que el movimiento de personas de este año sea casi el doble que el anterior. Según calculan en las ventanillas del muelle correspondiente a La Fluvial, unas 70 mil personas llegaron hasta el banquito durante la temporada pasada.
“Esta temporada arrancó muy bien. Los fines de semana recibimos a mucha gente con ganas de disfrutar de la isla”, declaró Lucía Caprile, del complejo La Fluvial
Las embarcaciones que parten desde los muelles ubicados en el parque Nacional a la Bandera tienen dos destinos: los complejos Vladimir y Dèja Vú. Ambos con extensas playas, restó, alquiler de sombrillas y reposeras y canchas para practicar deportes.
Este banco de arena, es tan extenso, que permite otras propuestas en sus 700 metros de playa, cada una con diferentes cualidades, que van desde ambientes relajados y tranquilos como la Playa Hanglin, hasta la opción que más disfrutan los jóvenes de la escuela de deportes náuticos extremos llamado Wike Kite Beach.
Zona Norte
La oferta de arena y río no se agotan en la zona céntrica, al contrario, la mayor propuesta y la más variada se ubica desde Costa Alta, hasta Granadero Baigorria. La isla La Invernada y la zona del Paraná viejo, están listas para esta temporada primavera- verano y esperan continuar con la buena racha del año pasado, donde fueron visitadas por miles de kayakistas.
Un gran beneficio que tienen estas playas, es que sus paradores ofrecen la posibilidad de acampar, hacer cabalgatas, excursiones de avistaje de aves y excursiones de pesca. Dichas actividades las convierten en opción primera para el grupo familiar. Los servicios que parten del embarcadero de Costa Alta (avenida Carrasco y Gutierrez) salen todos los días, desde las 10 hasta las 20. Las embarcaciones tienen dos destinos: Isla Verde, el histórico parador de la Invernada- con un costo de 60 pesos y El Pimpollal, un complejo ubicado sobre el Paraná Viejo cuya visita cuesta 80 pesos.
«Son los dos destinos más buscados, ambos, tienen espacios amplios, mucha playa, sombra, y, sobre todo, permiten estar en contacto con la naturaleza”
Cabe destacar que en ninguno de los paradores ubicados en estas playas, se cobra entrada extra.
Solo para lanchas y kayaks
La zona costera del Paraná Viejo, reserva otros sitios propicios para el disfrute de quienes tienen embarcaciones particulares. “La pulpería del Kayakista” hospeda cantidades de jóvenes que se animan a cruzar remando y eligen este parador como punto de encuentro. Pasa lo mismo con el bar “Hookipa” que con una corta trayectoria en la isla, ya sumo cientos de adeptos los fines de semana.
El comedor, proveeduría y bar de playa, Los Benitos es otro de los más buscados por grupos de familias. También ofrece camping parquizado y agreste, dormis, vestuarios, baños y duchas. Todo eso en un predio con una gran arboleda y una playa de aguas poco profundas.
Casi llegando a Baigorria, en la zona del puente Rosario- Victoria, se encuentra “Popeye” y “Puerto Pirata” que cierran el cordón playero disponible para visitar.
