Foto: Ilustrativa

En la mañana del pasado miércoles 7 de diciembre, Melina y sus cuatro hijos –de 15, 12, 9 y un año y medio de edad– partieron rumbo a la escuela. Mientras tanto, un cortocircuito en el aire acondicionado de su casa provocó un feroz incendio que arrasó con todo lo que encontró a su paso. Las llamas no solo generaron pérdidas totales en el inmueble, sino que también consumieron unos $320.000 que habían sido recaudados durante más de un año por las familias de los niños que juegan al fútbol en el Club 17 de Agosto, con la intención de hacerles una despedida de año y regalarles bicicletas.

El incendio se desató cerca de las 8.30 del miércoles en una casa ubicada en Pasaje Cala al 7.221, barrio Las Flores, sur de Rosario y, afortunadamente, no hubo que lamentar heridos, ya que ninguno de los seis integrantes de la familia se encontraba en la vivienda: los niños y su madre habían ido hacia la escuela, y el padre se encontraba trabajando.

Matilde, una familiar y vecina de las víctimas del incendio, dialogó con Conclusión y detalló que fue un vecino quien advirtió el humo en la vivienda. Preocupado por la situación, dio aviso al cuñado de Melina, quien se acercó al lugar y, al intentar abrir la puerta, fue derribado por el humo.

Si bien los bomberos se hicieron presentes, y diagnosticaron que las llamas comenzaron a raíz de un cortocircuito en el aire acondicionado, fueron los vecinos quienes realizaron las primeras acciones de combate contra el fuego, ayudados con las piletas pelopinchos que, dada la época del año, estaban cargadas de agua en sus patios.

Matilde indicó que una parte de la casa era de material y otra de chapa, lo que favoreció a la expansión del fuego, provocando pérdidas totales en el inmueble. Ahora, la familia alquiló temporalmente una vivienda en el barrio, mientras junta algo de dinero y materiales para comenzar con la reconstrucción de su hogar.

El caso tuvo repercusiones en Rosario, y la familia recibió múltiples donaciones de ropa, muebles y alimentos. Sin embargo, aún se requieren materiales o dinero, por lo que los interesados en colaborar pueden comunicarse con Matilde (341-3021611) o Melina Figueroa (341-3024305).

Entre las llamas y la solidaridad

En la casa de Melina había unos $320.000 que los padres de los niños que juegan al fútbol en el Club 17 de Agosto (ubicado en España 6.398) habían juntado mediante varios beneficios. La idea era hacer una despedida de año con regalos para los pequeños deportistas, pero el fuego devoró el dinero y obligó a postergar estos planes.

Como los niños –de 12 años de edad– se despiden de la categoría baby fútbol, los padres planeaban realizar una fiesta de fin de año, y regalarle una bicicleta a cada uno, junto a una gigantografía y camisetas encuadradas. Para esto, desde el año pasado realizan beneficios como bingos y rifas. Además, el club les prestó el buffet para que en los eventos deportivos puedan vender de comida.

Si bien desde le Gobierno de Santa Fe se comunicaron con el club y existe la posibilidad de que se entregue una ayuda económica, los padres continúan haciendo beneficios como venta de empanadas y bingos: motivados por la esperanza, no descartan hacer la despedida de año en los próximos meses, aunque dudan de si podrán volver a juntar una suma similar a la que se perdió en el fuego.