Los vecinos que conocían a Milagros en Nuevo Alberdi, decidieron este sábado quemar la precaria vivienda del hombre que la policía sindicaría como el supuesto asesino de la adolescente de 14 años que fue encontrada muerta dentro de una bolsa.

La construcción que fue devorada por las llamas y destruida está ubicada a la vera de un terreno en el que realiza su explotación una fábrica de ladrillos. Además, incendiaron los escasos objetos que se hallaban en el lugar.

Según fuentes policiales, el cuerpo sin vida de la joven había sido identificado en Nuevo Alberdi, en la zona rural de ese barrio del noroeste rosarino “a orillas del canal Ibarlucea a la altura de Grandoli y envuelto en bolsas de papel como las de cemento”, informó la policía.

La ubicaron gracias al alerta de un vecino que vio el bulto y discó 911. Hay un sospechoso identificado, con antecedentes por abuso sexual.

Anoche, el fiscal Miguel Moreno junto a la brigada de la Policía de Investigaciones se presentó en el lugar para rescatar el cadáver de la menor, que fue derivado al Instituto Médico Legal para establecer su identidad. Como también realizar la autopsia de rigor y tratar de determinar cuándo y cómo murió.

Milagros Sánchez vivía con su familia en inmediaciones de Grandoli y la avenida Granel, en la salida hacia la ruta nacional 34. La tarde del martes la joven se retiró de su casa y desde ese momento nada más se supo de ella.

El miércoles, la madre de la menor fue a radicar la denuncia por averiguación de paradero en la subcomisaría 2ª, que tiene jurisdicción en la zona, y entonces se dispuso un rastrillaje que no dejó muy conforme a los vecinos.