La bajante del río Paraná, cuya altura descendió hoy a 0,41 metro en la ciudad, obligó a la prestadora del servicio de agua potable provincial a añadir cañerías y sumar bombas sumergibles para su captación, informaron fuentes de la empresa Aguas Santafesinas SA (ASSA).

«Desde principios del 2020 trabajamos para asegurar la captación de agua en las siete plantas que tenemos en el río Paraná, y seguiremos realizando mejoras gracias a los recursos que nos aporta el Gobierno provincial», dijo el titular de ASSA, Hugo Morzán.

La empresa estatal que presta el servicio a dos millones de personas en 15 ciudades de la provincia de Santa Fe intensificó las acciones para captar agua del río Paraná, que desde el año pasado sufre una bajante histórica que, según los expertos, se profundizará en las próximas semanas.

ASSA posee siete plantas potabilizadoras sobre el río Paraná, desde la ciudad de Reconquista, al norte, hasta Rosario, al sur de la provincia.

Entre otras medidas, la empresa informó que en Reconquista «en la toma de la antigua planta se extendieron las cañerías de las bombas existentes en el muelle de captación».

Mientras que el acueducto de la Costa, ubicado en San José del Rincón, «se instalaron dos nuevas bombas sumergibles para asegurar la captación, que se suman a las fijas existentes en el muelle».

Por el mismo motivo, en la planta Monje del acueducto centro-oeste Aguas Santafesinas puso en funcionamiento «una nueva bomba en la toma sobre el río Coronda» a la vez que «se reubicaron las bombas existentes para mantener su capacidad de captación», detalló la compañía en un comunicado.

En el caso de Rosario, la ciudad con mayor cantidad de usuarios de ASSA, la empresa reemplazó una vieja bomba con más de 60 años de funcionamiento por otra de «última generación» y «se están instalando tres nuevas bombas suplementarias en una toma móvil adicional».

El presidente de Aguas Santafesinas dijo que «en el futuro inmediato el desafío será aún mayor, porque los niveles del río serán extraordinariamente bajos, de acuerdo a todos los pronósticos, por lo que estamos extremando las acciones en las tomas y plantas para afrontar esta situación».

Morzán resaltó que «a todo lo que hagamos desde Aguas es imprescindible sumar el aporte de los usuarios, realizando un uso racional y solidario del agua potable» ante las dificultades para su captación que supone la bajante del Paraná.

El Centro de Información Meteorológica (CIM) de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) informó hoy que la altura hidrométrica del río en Rosario se ubicó en 0,41 metro, lo que supone una variación negativa de 0,7 en relación al día anterior.

En la ciudad de Santa Fe el nivel es de 0,58 metro y en la localidad bonaerense de Ramallo se reduce a 0,28, según el informe diario del CIM.

De acuerdo a la información del Instituto Nacional del Agua (INA), la altura promedio del río Paraná en Rosario entre los años 1996-2020 fue de 3,35 metros.