Por Santiago Fraga

El 14 de marzo, el Centro Cultural de La Toma realizó una asamblea pública en la cual convocaron a la población a defender el establecimiento, ante una citación judicial que deslegitimizaba la propiedad del lugar en manos de los trabajadores.

Este martes, cientos de personas se congregaron en las puertas del Mercado Popular, sobre la calle Tucumán, mostrando diversidad de colores y banderas pero siempre con el mismo objetivo en común: defender un lugar que entienden propio.

Ejemplo claro de esto fue la cantidad de oradores que tuvo el acto realizado, donde representantes de casi todos los sectores políticos y movimientos sociales expusieron durante poco más de una hora las razones que los unen a ese lugar y la importancia de mantenerse luchando a favor del mismo.

En diálogo con Conclusión, Carlos Ghioldi, uno de los referentes del lugar, contó sus sensaciones ante la concurrencia en apoyo de su reclamo, y aseguró que se trató, “una vez más”, de los trabajadores organizados y los sectores populares en confraternidad y lucha con sus propios compañeros, “poniendo el establecimiento al servicio” de estos sectores.

“Cuando somos agredidos, ese mismo sector popular con el cual estuvimos confraternizando se moviliza y demuestra que aquellos sectores especulativos de poder que quieran atacar y agredir a este lugar se la van a ver muy fea, porque los trabajadores y el pueblo que nos acompaña nos estamos movilizando de manera contundente y dejando un mensaje bien claro: la toma no se toca, de acá los trabajadores no nos movemos”, aseguró con convicción Ghioldi.

La citación judicial que pone en riesgo la posesión del lugar por parte de los trabajadores hace referencia al expediente de la quiebra del Supermercado Tigre, en el año 2002, donde se deja entrever que no se les reconoce como propietarios, sino como “ocupantes”, contrariamente a lo que dos resoluciones judiciales hoy indican.
Al respecto de los responsables de esta citación, Ghioldi sostiene el pensamiento de que es “un sector que tiene una insensibilidad y una voracidad especulativa descomunal” pero que en esa voracidad “se da de bruces, choca, con la inmensa movilización social que se está expresando en defensa de este lugar”.

“Que el movimiento sindical, las CTAs, que todos los partidos políticos hayan votado, que las organizaciones sociales estén en este lugar, implica que esa pretensión especulativa tiene en frente una feroz muralla de solidaridad que no va a permitir que pase”, concluyó.

Conclusión estuvo presente en el acto y destacó las frases de algunos de los muchos y muy variados protagonistas:

Sonia Alesso (Amsafé Provincial): “Como siempre, los maestros no podíamos no estar acá. No solo vamos a estar, sino que estuvimos y estaremos siempre junto a los compañeros de La Toma que son un ejemplo de la lucha de los trabajadores. Este edificio recuperado por los compañeros y compañeras es parte de la historia de lucha de nuestra ciudad y parte de la historia de lucha del movimiento obrero. Y esto no pasa ‘en cualquier momento’. No hay casualidades históricas. Pretenden que los trabajadores no retrocedamos a los 90’, sino al 55’. Se pretende domesticar a la clase obrera y a los que pelean. Más que nunca la palabra de acción tiene que ser la unidad”.

Gustavo Teres (Amsafé Rosario y CTA Autónoma): “En los momentos de mayor debilidad de los trabajadores se reivindicaba este lugar como lugar de la clase obrera, desde el momento en el que se planteaba la posibilididad de desaparición de nuestra clase obrera a principios del 2000, donde se creían que iban a sustituir un sujeto, este era un lugar del movimiento popular y por sobretodo de los trabajadores, ocupados, desocupados y precarios. Nunca se perdió el norte de esa concepción. Un movimiento de resistencia que fue capaz de nuclear a lo más rico y variado de las experiencias de las empresas recuperadas y tomadas”.

Norma Ríos (presidenta de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos): “Lo importante es que los compañeros, con esa generosidad con que abrieron las puertas siempre, hoy tenemos un lugar para funcionar que no hubiéramos querido a través de la mano de ningún gobierno ni de ningún político y que hacía que estemos en la calle. Les pido algo para que tengan cuidadosamente en cuenta: ¿Saben porque este lugar le molesta tanto a patrones y jueces? Porque en este lugar se hizo una toma, se luchó, se enfrentó a quien fuera necesario, se logró la unidad de acción, y después de eso, de la lucha, se organizaron y construyeron esto que venimos acá, que vemos todos los días y que tenemos para seguir construyendo. Y eso el poder no lo perdona tan fácilmente. No lo olviden nunca, esta lucha, les guste o no les guste, ya está ganada”.

Otros de los oradores que se han expresado han sido Octavio Crivaro (PTS, Frente de Izquierda), Marina Magnani (La Cámpora), Fernando Rey (Patria Grande), Lucila De Ponti (diputada nacional por el Frente para la Victoria, Movimiento Evita), Felipe Porta (Centro de Estudiantes de Humanidades y Artes), Fernanda Gigliani (concejala de Iniciativa Popular), y representantes del movimiento LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans), CTEP Rosario (Confederación de Trabajadores de la Economía Popular), Federación Universitaria de Rosario, Federación Juvenil Comunista de Rosario y Franja Morada, entre otros.

Finalmente, a modo de cierre de acto los trabajadores del lugar recordaron que se formó una Comisión Permanente en Defensa de La Toma, e invitaron al pueblo a movilizarse tanto el 24 de marzo como el 31 a las 15 horas, cuando “el juzgado será muy bienvenido” en ese lugar. “Este lugar va a desbordar de pueblo, que sepan que hay una batalla muy importante en esa jornada y seguramente los estaremos convocando porque veremos qué pasos se irán dando más adelante. Nosotros de acá no nos movemos”, finalizaron.