El coordinador de Gabinete municipal, Rogelio Biazzi, advirtió este lunes que los coches de la línea Q -suspendida en los últimos días hasta que bajen las temperaturas de este verano- no están preparados para circular en la ciudad en esta época del año y tampoco pueden recibir mantenimiento ni recambio de repuestos, ya que la empresa fabricante es una firma rusa que cerró.

«No se si un coche de estos se llegó a probar en la ciudad de Rosario antes de la compra. Evidentemente están fabricados para funcionar en temperaturas como las que hacen en países como Rusia y claramente no están acondicionados para poder hacerlo en el verano rosarino», admitió este lunes el funcionario municipal en declaraciones a LT8.

De esta manera, el problema empezó a gestarse en el mismo momento de la compra, realizada en 2017 a la empresa Trolza, que después quebró y dejó de existir. «Se nos hace imposible a nosotros el servicio de mantenimiento postventa, la compra de insumos y repuestos para arreglar las baterías», explicó Biazzi.

>Te puede interesar: Afectada por el calor: desde este lunes, y hasta que baje la temperatura, la línea Q dejará de circular

Según planteó, la empresa Movi intentó por todos los medios volver a poner en funcionamiento las baterías que se ven afectadas ante las altas temperaturas del verano rosarino, pero no logró hacerlo justamente porque no puede abastecerse de los insumos para al arreglo.

En ese marco, la Municipalidad decidió suspender a partir de este lunes, y hasta que ceda el calor, la circulación de la línea Q. En su lugar, los usuarios podrán utilizar la K y el 127, que tienen recorridos similares.

«Tomamos esta medida en beneficio del usuario, para hacer más previsible su viaje. En lugar de quedar tirado en mitad del viaje, hemos decidido suspender provisoriamente la línea Q y poner en su reemplazo el refuerzo de dos líneas: en el primer tramo, cuando empieza el recorrido, será reemplazada por la 127, y en el segundo por la K», especificó el funcionario local.

El coordinador de Gabinete además aclaró este lunes ante Conclusión que la medida tiene un tono provisorio y que, una vez que desciendan las temperaturas, los coches de la línea Q volverán a las calles de Rosario, ya que el problema lo tienen puntualmente en días calurosos.

«Esto es temporal. Los coches funcionan perfectamente cuando están unidos a la catenaria y también con la batería autónoma, pero con temperaturas más bajas de las que estamos teniendo ahora. En el momento que la temperatura baje y entre en un espectro que las baterías aguanten, volverían al recorrido de la Q. Esperemos que para el comienzo del ciclo lectivo esto pase», afirmó Biazzi.

Y agregó: «En este tipo de compras no existe, no es usual esto de poder probar un colectivo en el terreno, además porque no lo podés probar un rato, tendrías que tenerlo en funcionamiento durante varios meses para ver si aguantan. En ese momento, se hizo la compra con las condiciones establecidas en el pliego licitatorio, llegaron los coches y se empezaron a usar. Después, con el tiempo, se empezaron a ver los problemas que mostraban las baterías con las altas temperaturas en Rosario».

A su vez, Carlos «Charly» Cardozo, concejal de Juntos por el Cambio y vicepresidente del Ente de la Movilidad, expresó: “Se ha producido una falla muy recurrente en todas las unidades de esta línea. Se sobrecalientan las baterías, funcionan a muy baja velocidad o no funcionan”.

“Esto genera un problema de conexión muy grande para todo el sudoeste, porque es la línea que viene con baterías por Av. Francia hasta Mendoza, después allí arranca el cableado de la K, que llega hasta la Ciudad Universitaria. Trae muchos trastornos, se ha emparchado de alguna manera con el trayecto de la 127, pero ya supone un trasbordo, o sea, un inconveniente para el vecino”, indicó el funcionario.

“Nosotros como concejales tenemos varias preguntas por hacer. Una tiene que ver con que no se tomaron en cuenta estas condiciones técnicas y climáticas a la hora de comprar los coches, porque indudablemente resulta que son diseñados para el frío de Rusia y no para los rigores de esta temporada en Argentina”, apuntó Cardozo.

“Otra cuestión es que la empresa, según indicó el propio secretario coordinador del municipio, cerró. Además del problema de las baterías, ¿el día de mañana habrá un mercado de repuestos para estos trolebuses si se siguen rompiendo otros elementos?”, se preguntó el edil.

“Para mí, lo que hay que hacer es buscar el medio técnico para ver cómo se reemplazan estas baterías por unas de procedencia nacional o importada que aguanten los 365 días del año”, opinó.

“Lo importante es cómo garantizamos que estas unidades, que son más caras que un colectivo diesel pero duran más tiempo, puedan funcionar en las cuatro estaciones. Es necesario que esto se haga antes de que llegue el próximo verano”, concluyó.

¿QUÉ RECORRIDOS HACEN LA K Y EL 127?

Actualmente, funcionan dos líneas con recorridos similares y complementarios que son opciones para la movilidad de los usuarios de la línea Q. Por una parte, hace el mismo recorrido de la línea K con un trazado común de 11,4 kilómetros, desde Francia y Mendoza, hasta la Ciudad Universitaria. Y con la línea 127 comparte similar recorrido sobre Francia y Mendoza hasta el Centro Municipal Distrito (CMD) Sudoeste.

Línea 127

Ida: Desde B. y Ordóñez y Av. Ov. Lagos, por Ov. Lagos, Colectora Juan Pablo II, Av. Francia, Av. Arijón, Crespo, H. de la Quintana, Av. Francia, Mendoza, Moreno, San Lorenzo hasta Laprida.⁣

Vuelta: Desde San Lorenzo y Laprida, por Laprida, 3 de Febrero, Av. Francia, Av. Nuestra Señora del Rosario, Crespo, Av. Arijón, Av. Ov. Lagos, Colectora José M. Rosa, Curapaligüe, B. y Ordóñez hasta Av. Ov. Lagos.⁣

Línea K

Ida: Desde Wilde y Mendoza, por Mendoza, Alem, Cerrito, hasta Necochea.

Vuelta: Desde Necochea y Cerrito, por Necochea, 3 de Febrero, 1º de Mayo, San Juan, (desvió: San Juan, Laprida, 3 de Febrero, Mitre, San Juan a su recorrido) Mendoza hasta Wilde.

En relación con el desvío en calle San Juan, en la línea K algunos de los servicios que circulan por calle Mendoza no llegan a la Ciudad Universitaria, por lo que las y los pasajeros deben descender en Mendoza y Presidente Roca y ascender a una unidad autónoma de la línea K que completa el recorrido. Todas las unidades cuentan con identificación del punto de término del recorrido, ya sea Mendoza y Corrientes o Ciudad Universitaria.