Foto: Florencia Vizzi

Basta de ruidos. El concejal radical Martín Rosúa solicitó el pasado martes la puesta en marcha en carácter de urgencia de la ordenanza que regula los ruidos molestos en obras en construcción de la ciudad de Rosario, a partir de la gran cantidad de reclamos y denuncias recibidas en los últimos meses.

La modificación, que se produjo hace un año, permite que cualquier vecino pueda realizar denuncias por ruidos molestos y no solamente aquellos que ocupen domicilios linderos a las obras en construcción y, a su vez, modificó los horarios en los que se pueden desarrollar los trabajos, quedando excluidos totalmente los domingos y feriados.

Asimismo, el proyecto del edil radical, aprobado por unanimidad en el cuerpo legislativo de la ciudad, estableció como únicos horarios fijos para los trabajos en las obras de lunes a sábado de 8 a 13 y de 15 a 19, considerándose como una infracción cualquier ruido realizada fuera de esos términos.

“Nuestra ordenanza vino a solucionar un importante conflicto que se genera a partir de que, con la anterior normativa, resultaba muy difícil elevar una denuncia ya que solamente podían hacerla quienes vivían al lado de las obras en construcción. Es importante que todo aquel que se sienta afectado pueda ser debidamente escuchado”, explicó Rosúa.

Según advirtió el propio concejal, desde el momento de la aprobación hasta el día de la fecha, no se han registrado objeciones de las partes interesadas sino que se almacenó una importante cantidad de reclamos a raíz de que aún no se ha reglamentado la nueva normativa.

“Nosotros apoyamos al sector de la construcción y siempre valoramos positivamente que existan obras y nuevas edificaciones dentro de la ciudad, pero pretendemos brindar un ordenamiento correcto que también contemple el bienestar de los vecinos”, amplió el titular de la comisión de Producción.

El incumplimiento de esta reglamentación será considerado una falta, prevista en el Artículo 603-14 del Código de Faltas, y pasible de las penalidades allí establecidas. Asimismo, anoticiada la Guardia Urbana Municipal (GUM) por cualquier vecino de la obra en cuestión, sea lindero o no, y verificada la infracción por dicha autoridad, se procederá a labrar acta de todo lo actuado, la cual será remitida, conjuntamente con las actuaciones existentes al Tribunal de Faltas, y copia de las mismas a la Dirección General de Obras Particulares para su toma de razón.

También la GUM procederá a la paralización inmediata de las tareas realizadas en contraposición de lo dispuesto por la presente ordenanza, en caso de que sea considerado pertinente.