El 12 de octubre de este año, un imperfecto en la conexión eléctrica del céntrico bar Café de la Flor provocó el fallecimiento por electrocución del bajista del grupo Raras Bestias, quienes se presentaban para tocar en el marco de una noche en la que se debían presentar más bandas.

Bajo el lema “los micrófonos no matan, la avaricia sí”, familiares, amigos, músicos y allegados se dieron cita esta tarde en la Plaza Pringles (Córdoba y Paraguay), para reclamar por justicia y por mejores condiciones laborales para los músicos de la escena rosarina.

Sebastián Mauro, saxofonista de la banda afectada por la tragedia, contó a Conclusión que “la marcha es para exigir justicia, que esto no quede en la nada, que no se apague, que siga todo vigente, que Adrián siga vigente, y exigir mejores condiciones laborales para los músicos que se siguen subiendo a los escenarios”.

Policía científica y los peritajes a cargo de la fiscal Valeria Piazza Iglesias comprobaron que el disyuntor encargado de cortar la electricidad del lugar estaba desconectado, lo cual se lo conoce como “puenteado”, y que es también, básicamente, conectar la electricidad del lugar directamente a la proveniente de la calle.

“Nosotros tocamos un domingo, y los días anteriores, tanto el sábado como el viernes, ya había saltado la luz en varias oportunidades, por lo tanto los chicos que estaban tocando también tuvieron que cancelar sus shows y cortar por la mitad. Lo que nosotros creemos es que entre el sábado y el domingo fue cuando se desconecto el disyuntor para que no siga saltando la luz, y ahí fue lo que pasó con Adrián”, declaró Mauro.

A su vez, el joven denunció que otra de las cosas que están pidiendo “son respuestas”, ya que “nadie” se acercó a ellos para intentar “tratar estas problemáticas”, y mientras tanto “los artistas se siguen subiendo a los escenarios”, “los lugares siguen abiertos”, y no saben “si los controles se intensificaron, porque si siguen siendo los mismos es todo una bomba de tiempo que en cualquier momento vuelve a estallar, porque hay muchísimos lugares en Rosario para controlar y exigirles a los dueños que los pongan en condiciones”.

La convocatoria se realizó a las 18 en la Plaza Pringles, donde presentaron los grupos Cualquier Bondi, Innova e Inmerso, junto con una presentación del cantante y uno de los guitarristas de Raras Bestias. Desde ahí marcharon hasta la Plaza 25 de Mayo (Córdoba y Buenos Aires), en frente de la Municipalidad, donde actuaron dos bandas locales reconocidas, como Patagonia Revelde y Amaro Lucano. Finalmente, la movilización culminó con la lectura de un comunicado por parte de los muchachos de la banda.

En cuanto al apoyo recibido por los artistas, Sebastián Mauro agradeció y afirmó que muchos de los artistas locales los apoyan mucho, “los que pudieron venir y los que están en contacto de otra forma”. “La solidaridad siempre está”, afirmó.

Una de las bandas que se sumó a esta movida fue Amaro Lucano. José Antonio Lioi, cantante de la banda, fue muy crítico respecto de las autoridades, y sostuvo que lo importante es “tratar de que eso no quede impune”. “Estamos ante un caso de negligencia criminal, y como pasa cada dos por tres, acá después de un tiempito ya nadie se acuerda. De hecho hace un mes estuvimos en esta misma plaza reclamando y que yo sepa no pasó nada todavía”, denunció a Conclusión.

A su vez hizo hincapié en las trabas que se le ponen a los músicos a la hora de tocar, como por ejemplo que a ellos se les hayan cancelados shows porque un vecino denunció ruidos molestos pese a que el lugar estuviera acustizado, y atacó al respecto a Pablo Seghezzo, Secretario de Control y Convivencia, afirmando que “siempre están distraídos ante las cuestiones que tienen que controlar”, y que las habilitaciones son “persecutorias”, con objetivos que no cumplen el “garantizar el bien común”.

Respecto a la movida, aseguró: “está buenísimo que algunos chicos se hayan atrevido a estar acá, recordando a este loco cuya vida quedó trunca por una injusticia mucho más grande que esta ciudad. Rosario es un lugar muy duro para un espíritu sensible, y para hacer este tipo de cosas hay que estar de pie, aunque te dé un poquito de miedo, ser valiente es el que le da para adelante aún teniendo miedo”.

Además, agregó que no conocían previamente a los integrantes de Raras Bestias, pero que apenas ocurrió el trágico hecho se comunicaron y se pusieron “en la primera fila”.

“Yo tengo a mis hijos que tocan en una banda llamada Tribù, y si me pongo en el lugar de padre ¿Qué tengo que hacer en el día dos? (en relación al día después de la muerte). Ellos tocan porque yo les legué el amor por la música, crecieron con guitarras, baterías, y si una vida de 16 años quedó trunca porque alguien puenteó el disyuntor, tengo que guardar todas las guitarras y tirar la batería al río”, criticó.

“Yo tengo 49 años y no tengo muchas esperanzas de ver algún cambio, pero peleo por mis hijos, los que ya cumplieron 30, los que todavía no llegaron a los 20, y los que no llegaron a los 10. No puede ser que naturalicemos una muerte”, finalizó Lioi.

Finalmente, Sebastián Mauro afirmó que el objetivo que tiene hoy por hoy la banda, además de volver a tocar el año que viene, es hacer esto “todos los meses”. “Hoy después de la marcha ya empezamos a ver para el mes que viene, el 11 o 12 de diciembre, hacer otra marcha más, sumar algunos artistas, y hacer algo más grande. Queremos terminar el año de la mejor manera ante todo lo que nos pasó”, concluyó.

 

 

Fotos: Florencia Vizzi