Padres de alumnos del nivel inicial, del Normal 2, se manifestaron ayer en las puertas de la institución, en el marco de un reclamo a la Universidad de Nacional Rosario, que debía realizar reparaciones para habilitar el patio de los niños.

El espacio para que los niños puedan jugar, se encuentra inhabilitado desde agosto del año pasado. Esto se debe a que la pared lindante, del lugar de recreación, se encuentra deteriorada y ya hubo desprendimientos de revoque.

El deterioro de la fachada oeste de la Facultad de Derecho, lleva décadas sin resolverse. Por eso hay colocados allí desde hace veinte años andamios con fenólicos destinados a sostener desprendimientos de mampostería sobre el patio del colegio, que es descubierto y se encuentra debajo de esa medianera.

La protesta incluyó una movilización hacia el interior de la facultad y, luego, a la sede local del Ministerio de Educación santafesino.

Si bien se pensó que con las obras de restauración de la facultad tras el incendio ocurrido hace doce años llegaría la solución, nada de eso sucedió. Es que los trabajos no incluyeron la pared que linda con el Normal y la situación sigue poniendo en grave riesgo a los 240 alumnos de jardín de infantes y a sus docentes.

Hace ocho meses un pedazo de una vieja madera montada sobre un andamio cayó y casi golpea a uno de los chicos. Tras eso, y para evitar una tragedia, el sector fue clausurado y así el colegio se quedó sin un espacio vital para la recreación de los niños.

El reclamo formal para resolver la situación ya fue elevado hace tiempo a la UNR por parte de las autoridades del colegio. Los pedidos tienen el respaldo de los padres de los alumnos, quienes no detienen allí sus quejas, ya que también están solicitando al Ministerio de Educación santafesino que se ponga al frente del conflicto y se siente a negociar con las autoridades de la universidad pública local.

Según señalaron ayer algunos integrantes de la cooperadora del Normal 2, lo único que hizo la UNR para el inicio de clases de este año fue renovar los viejos paneles sobre los andamios. A la par, el Ministerio de Educación provincial tiene previsto agregar en las próximas semanas una mediasombra que refuerce la protección. Con eso, el sector para que los niños jueguen se volvería a habilitar. Sin embargo, son sólo paliativos provisorios que no resuelven el asunto de fondo.

Lo que hicieron los padres ayer en la protesta fue entregar petitorios a las autoridades.

El que se dejó en la Facultad de Derecho está dirigido al rector de la UNR, Darío Maiorana, y otro se llevó a la sede local del Ministerio de Educación con el fin de que llegue por la vía más directa a manos de Claudia Balagué, la titular del área.

Demandas

La movilización se realizó por la mañana luego de que las autoridades del Normal dieran inicio formal a las clases del año en curso y contó con una buena participación de padres.

Para la ocasión se produjeron algunas pancartas alusivas al reclamo. “Por un patio sin peligro, queremos jugar sin riesgos”, decía una de ellas portada por uno de los niños, mientras detrás los mayores pedían con cánticos que el asunto se resuelva pronto.

“Las autoridades escolares agotaron las vías administrativas de reclamo, por lo que los padres decidimos tomar la posta en esta lucha. Nuestros hijos siguen en peligro de que se les caiga un trozo de pared encima”, denunció Ana Domínguez, madre de un alumno de preescolar.

Denuncia peligro de electrocución

Guillermo Amerise, presidente de la cooperadora de la escuela, recordó que al histórico pedido de reparación del paredón oeste de la Facultad de Derecho se le suman otros que también llevan unos cuantos años en agenda, incluyendo la instalación de un cortacorriente.

“En la escuela no hay cortacorriente y es un hecho grave. Los fondos para realizar esa obra están desde los primeros días de enero, pero no se avanza y esto no puede esperar”, sostuvo un cooperador.

“No queremos hacer una marcha pidiendo justicia por una víctima. Gracias a Dios todavía no pasó nada, pero necesitamos una solución inmediata”, agregó.