El dolor, la bronca y la indignación por el asesinato de Joaquín Pérez en barrio Arroyito, puso en tapete varias problemáticas de larga data: la inseguridad permanente, la violencia constante en las calles y la inoperancia eterna de los políticos y la Justicia para resolver el reclamo de una sociedad entera.
Por si fuera poco, la muerte de Joaquín reflotó además otro problema, que según denuncian desde el Sies, también lleva años: la falta y el mal estado de las unidades del servicio. De hecho los choferes manifestaron que la ambulancia demoró en llegar al lugar del crimen por un problema mecánico.
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Al respecto, Daniel Fernández delegado del Sies habló con Conclusión y aseguró que “hace dos años y medio que presentamos nota denunciando la falta y el mal estado de los móviles. Todo el desgaste de esos móviles, a los que no se les hizo el mantenimiento correcto, hoy lo estamos pagando con muertes como las de Joaquín”.
“Necesitamos un recambio urgente porque tenemos unidades que directamente no pueden salir a la calle. Incluso la misma ambulancia que atendió a Joaquín ese día, hoy no está trabajando”, sentenció.
En ese sentido, dijo que “hace 20 días ya veníamos denunciando que funcionaban mal las luces del tablero, que había desperfectos y que directamente no aceleraba”. Y en seguida aclaró: “Eso está escrito en la hoja de ruta que llevamos diariamente. Pero para no dejar descubierto un espacio, ese móvil siguió trabajando”, en referencia al móvil del Sies que asistió a Joaquín el pasado martes a la noche.
“Ellos -las autoridades- piensan que contamos con determinado número de móviles, porque figuran dentro del utilitario, pero en verdad muchas no se pueden usar porque no están aptas, ni siquiera para salir hasta la puerta”, manifestó indignado al tiempo que reconoció que también padecen una falencia en el recurso humano, tanto médico como de enfermeros, y en el instrumental médico que “vamos equipando como podemos”.
Según preció Fernández, las últimas ambulancias que ingresaron fue hace tres años y “dijeron que iban a hacer un plan de contingencia para renovar toda la flota y hasta el día de hoy lo estamos esperando”.
“Al ser un sistema integrado es responsabilidad del municipio y de la provincia”, cerró repartiendo culpas a unos y otros.
