Vecinos y comerciantes de España al 500 están reclamando que se traslade la sede local del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación que está ubicada en esa cuadra debido a las reiteradas protestas que allí se realizan. Las mismas, cuentan los vecinos, entorpecen el normal funcionamiento de la actividad comercial de la zona y genera complicaciones en la circulación habitual de quienes viven allí.

Según contaron los comerciantes ante Conclusión, cuando se realizan las manifestaciones frente a la sede del ministerio nacional deben cerrar los negocios y «la gente no puede salir de sus casas», ya que no puedan retirar los vehículos de las cocheras. Ante esta situación, y mientras esperan una solución proveniente de Buenos Aires, exigen la intervención de la Municipalidad.

Diego Rubio, dueño la panadería ubicada en España al 500, explicó a Conclusión que «la queja no es puntualmente contra las manifestaciones, sino por el lugar que eligieron para que esté esta oficina (de Desarrollo Social), adentro de la ciudad de Rosario, teniendo en cuenta la conflictividad social que se iba a vivir en estos años producto de las políticas económicas que se vinieron desarrollando».

«Lo que le estamos pidiendo a las autoridades es que lo trasladen a un lugar en el que a nosotros no nos genere este perjuicio, porque es sabido por cómo está la situación que esto va a ir empeorando. De acá a las fiestas va a ser cada vez peor», agregó.

Los comerciantes indicaron que han llegado a estar hasta seis días sin trabajar por la seguidilla de manifestaciones en la vía pública.

Al ser consultados por los reclamos formales que han realizado, Rubio contó que presentaron «una carta a la oficina que está acá, donde nos dijeron que se la tenemos que presentar directamente a Carolina Stanley, en Buenos Aires, porque ellos acá no toman determinaciones».

 

«Lo que pedimos -continuó- es el amparo de la Municipalidad de Rosario, que es también la que nos regula a nosotros la actividad, porque nos impone un montón de regulaciones y restricciones para desarrollarla sin afectar al resto de los vecinos, que tienen que ver con los ruidos nocturnos que nuestra producción pueda llegar a generar con la carga y la descarga cuando un camión viene fuera de horario».

«A veces no podemos recibir la mercadería porque estamos fuera de horario por lo que dispone la Municipalidad de Rosario, pero resulta que a 30 metros de nosotros tenemos una institución que nos genera una gran cantidad de conflictos y no respeta ninguna de las normas que nos exige la Municipalidad», concluyó el comerciante.

Otro de los puntos que tocaron los comerciantes es el de la circulación de los vehículos por esos cien metros en los que habitualmente se realizan los reclamos. Según relataron los vecinos, cuando quieren salir con el auto y piden permiso, los manifestantes los dejan pasar sin objetar nada, pero al circular tienen «diez criaturas dando vueltas alrededor del auto a 30 centímetros de donde vos estás movimientos, es un riesgo, puede pasar cualquier cosa».