Un grupo de vecinos del barrio Luis Agote se reunió esta tarde en la sede de Gobernación para reclamar por la inseguridad de la zona. En el cónclave estuvieron presentes Pablo Seghezzo, de la Secretaría Control y Convivencia Ciudadana, y Gustavo Zignago del  Ministerio de Seguridad de la Provincia.

En diálogo con Conclusión, los voceros del grupo de vecinos, Germán Gago y Ezequiel Monte, manifestaron que «si bien han notado algunas transformaciones de forma, faltan las fundamentales transformaciones de fondo»

En ese sentido reconocieron algunas cuestiones implementadas por la Municipalidad, como la poda de arboles y una mejora en la iluminación. Pero insisten en que continúan las entraderas, robos y arrebatos. Sin ir más lejos «la semana pasada le desvalijaron la casa a una vecina, que casualmente trabaja para la municipalidad».

Además, marcaron que es necesario aumentar el patrullaje policial y dividirlo, porque, afirmaron, «hay policías dando vueltas, pero ocurre que  en una cuadra hay cinco juntos y en el resto de las cuadras no ha ninguno».

Gago agregó también que Luis Agote es un barrio que tiene características muy particulares, por encontrarse tan cerca de la Terminal de Ómnibus «Mariano Moreno» y de ese micro universo que la rodea y que incluye, por supuesto, las numerosas «whiskerías»de la zona. Pero explicó que «tiempo atrás, ese submundo no se mezclaba y no se metía con los vecinos del barrio. En cambio, en estos últimos años eso ha cambiado radicalmente y la delincuencia se ha apoderado del barrio y se lleva por delante a todos los vecinos». Y agregó: «algunos prostíbulos han cerrado, para volver abrir días después a pocos metros de dónde estaban».

Germán Gago es, además, dueño del bar El Negro ubicado en la esquina de Callao y Brown, de Barrio Pichincha, lugar que ha sufrido varios robos en su local, incluso una vez le llevaron hasta las mesas del bar.

A su vez, Seghezzo prefirió no dar declaraciones hasta terminada la reunión, pero aseguró que se encuentran «trabajando en el tema» y que considera que «hay mejoras.»

Foto: Florencia Vizzi