Efectivos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) allanaban distintos espacios del penal de Ezeiza, en la provincia de Buenos Aires, en el marco de la causa en la que se investigan supuestas maniobras de espionaje ilegal sobre políticos, periodistas, dirigentes sociales e incluso sobre ex funcionarios que estuvieron detenidos en esa cárcel.

El allanamiento lo dispuso el juez federal de Lomas de Zamora Federico Villena y también incluyó tareas de la Gendarmería, que se encargó del perímetro de la cárcel de Ezeiza.

La medida fue dispuesta después de que trascendiera que, durante el gobierno de Mauricio Macri, hubo un grupo de ex agentes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) que se habrían dedicado a espiar dentro de la cárcel de Ezeiza.

Días atrás, el juez Villena había allanado las oficinas de la Dirección de Análisis de Información del SPF, el sector de inteligencia conocido por el nombre de “Área 50”; también en búsqueda de elementos que permitiera determinar si se realizaron maniobras de espionaje ilegal en las cárceles federales.

Del allanamiento realizado en el “Área 50” habrían surgido elementos que precipitaron el nuevo allanamiento; aunque algunos datos surgieron también de audios difundidos por un programa de televisión en los que agentes de inteligencia hablaban de “alambrar” la cárcel (poner micrófonos), que fueron incorporados en estos días al expediente.

El lunes, el canal de noticias C5N informó que personal ajeno al servicio penitenciario había ingresado al pabellón B del módulo 6 del penal de Ezezia a realizar tareas de “limpieza”, lo que fue interpretado en el mundillo judicial como una eventual maniobra para ocultar prueba.

En ese penal estuvieron detenidos, entre otros, el ex vicepresidente Amado Boudou; el ex secretario de Legal y Técnica de la Presidencia y actual Procurador del Tesoro Carlos Zannini; el dirigente Luis D’Elía; y el ex funcionario Carlos Kirchner, primo del ex presidente.