Carolina Garrido tiene 10 años, debió volver con su padre luego de unas vacaciones de 5 días en Catamarca, adonde estuvo con su madre y abuelos, pero no fue así.

Según reveló Sandro Garrido a Conclusión, el 20 fue a buscar a su hija al estudio jurídico del cual debía retirar a Carolina, ubicado en calle Italia al 100, pero tras no haber sido atendido, comenzó su búsqueda.

Garrido indicó que una vez que venció el plazo de 5 días, acordado judicialmente por ambos progenitores, y ante la imposibilidad de comunicarse a través del celular, viajó a la localidad catamarqueña de Cumbicha para encontrarse con su hija.

Según también indicó su hermana Mónica Horvath, residente en Rosario, el progenitor procuró dar con Carolina a través de una orden judicial que solicitaba el allanamiento de la casa donde vive su abuela materna.

“El abuelo es concejal y la abuela es docente en Catamarca – explicó Garrido – y por ello la policía se negó a aceptar la decisión de allanar la casa, pero cuando el juez de paz exigió que se proceda, se habían llevado a la nena por el fondo de la casa”.

“Según me contaron, cuando la pasaron por un paredón de atrás, la nena se cayó, se golpeó y se desmayó”, agregó el progenitor.

En otro orden, Sandro Garrido contó que está en la localidad catamarqueña parando en lo de su padre “hasta que la nena vuelva conmigo”.

“Doy la vida por ella” – afirmó – a la vez que informó que tiene “avanzada la tenencia” de la menor y que “con todas las pruebas que tengo es seguro que sale a favor mía”.

Carolina hacía dos años y medio que vivía con su padre en Rosario, después de que éste hiciera una denuncia porque la nena “dijo que no convivía con su mamá, sino con sus abuelos y tías”.

“Pero lo grave era que Carolina se encontraba con un cuadro de desnutrición, con una fuerte adicción al azúcar, parásitos y un severo caso de pediculosis”, indicó la tía de la niña, Mónica Horvath, quien también dialogó con Conclusión.

“Allá nunca la alimentaron bien, le daban solamente fideos con mayonesa, cosas dulces permanentemente, no sabía comer carne ni tortilla; cuando comía carne le daban arcadas, hubo que enseñarle a comer, era como si estuviera anoréxica”, agregó.

Finalmente, Horvath contó que la jueza de la ciudad de Catamarca se declaró incompetente “anulando todo lo que la familia materna presentó en su momento” y anunció que el próximo jueves 6 se realizará una marcha frente a los Tribunales de Rosario a las 10.30, para que la niña sea restituida a su padre.

Foto publicada por Sandro Garrido en el grupo de Facebook «Argentina busca a Carolina».