Tras la investigación y posterior detención por parte del personal de la Policía de Investigaciones (PDI) y los Fiscales Nicolás Foppiani, Georgina Pairola, Gisela Paolicelli y Mara Lagar, que derivaron en 14 allanamientos en Rosario y uno en Funes a los fines de desbaratar una banda que se dedicaba a efectuar secuestros virtuales, disminuyeron considerablemente la cantidad de denuncias.

El procedimiento arrojó la detención de 17 personas y se secuestraron 21 vehículos, 56 celulares, 5 armas de puño y 1 arma larga, dinero en efectivo (en moneda nacional y en dólares) y cheques por la suma aproximada de 2 millones y medio de pesos y varios electrodomésticos.

Se detuvieron 17 personas (15 hombres y dos mujeres). De este modo, con el trabajo en conjunto de la PDI y de la Fiscalía, se logró quebrar el funcionamiento de un grupo de personas que presuntamente cometían estafas bajo la modalidad de “secuestros virtuales”, aprovechándose de la situación de vulnerabilidad de sus víctimas (la mayoría personas mayores de edad), quienes entregaban dinero u otros bienes de valor creyendo que algún ser querido era víctima de un secuestro a cambio de su liberación.

Varios de los imputados continúan detenidos y restan aún ser capturados tres miembros de la banda. Hasta las detenciones el 21 de junio, se realizaban en la ciudad de Rosario aproximadamente un promedio de 2 denuncias diarias por secuestros virtuales en la Fiscalía Regional de Rosario (que ingresaban desde una Comisaría, el Centro Territorial de Denuncias y/o la misma Fiscalía).

Ese número ha disminuido radicalmente, al punto tal que sólo se registraron en la Fiscalía Regional cuatro denuncias desde el 21 de junio. Número que, además, no ilustra la “cifra negra”, es decir, aquellos hechos que ocurrieron y que por algún motivo la víctima no denunció, por lo que la cantidad de estafas podría ser superior.

De hecho, la Central de Emergencias 911, informó que, desde el 1 de enero de 2015 hasta el 20 de junio, hubo 691 llamados en los que se anoticiaron secuestros virtuales, y sólo 3 llamados a partir de la detención de la banda.

Cabe destacar que no todas las personas que llamaron al 911, formalizaron luego su denuncia para que se inicie una investigación penal en la Fiscalía. Si bien no puede aseverarse que exista una relación directa entre el desbaratamiento de la banda y la reducción de las denuncias, son destacables estos números en cuanto a la disminución de los secuestros virtuales.

En tanto desde Fiscalía solicitan colaboración para traducir escuchas telefónicas en dialecto romaní.