El rector de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), Miguel Irigoyen, dijo que «el voto de Horacio Rosatti no amerita su expulsión» de dicha casa de altos estudios y resaltó que «actuó en su convicción y hay que ser respetuosos de las instituciones”.
El docente de la UNL Jorge Fernández le pidió a Javier Aga, decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, que la casa de altos estudios expulse como docente a Rosatti por el fallo que le permitió a un represor el beneficio del 2×1.
En declaraciones efectuadas en radio Universidad Nacional del Litoral, Irigoyen puso de relieve que «una cosa soy yo como ciudadano y otra como rector. Yo no tengo el conocimiento jurídico para opinar sobre el fallo de la Corte Suprema».
Luego indicó que «me parece apresurado condenar a los jueces de la Corte Suprema que votaron por el afirmativo de aplicar el 2×1 para un represor. Entiendo que actuó en su convicción».
Más adelante dijo que “esto no significa justificar el fallo. Hay que respetar los poderes», y añadió que «el Congreso subsanó con una nueva ley la ventana jurídica que había, que permitía distintas interpretaciones».
«Yo tengo familiares desaparecidos; tengo mucho malestar con este fallo. Los crímenes de lesa humanidad no deben ser conmutados. Ahora, esto no amerita un pedido de expulsión de Rosatti de la universidad”, puntualizó finalmente.
