La primera jornada del juicio más emblemático de la ciudad comenzó con varios incidentes. Luego de la negativa de los ocho acusados, sindicados como jefes de la banda, de ingresar a la sala de audiencia se sumó un nuevo escollo. Luego de la presentación de las partes que intervendrán en el debate, la defensa presentó su planteo.
El abogado defensor de Ramón “Monchi Machuca, Carlos Edward presentó la recusación al presidente del tribunal, Ismael Manfrin y a la vocal María Isabel Más Varela, por considerar que ya tuvieron acceso a las pruebas, por haber formado parte del tribunal que juzgó a los acusados por el homicidio de Claudio “Pájaro” Cantero, líder de la banda asesinado en mayo del 2013.
El defensor basó su planteo en que los jueces “tomaron conocimiento previo de pruebas al haber intervenido como integrantes del tribunal del juicio del homicidio de “Pájaro” Cantero”, en el cual absolvieron a los acusados.
“Este planteo recusatorio no tiene por finalidad ni impedir, ni entorpecer el debate, pero es obligación de la defensa pedir un tribunal imparcial y un juicio justo”, señaló Edwards.
Al mismo tiempo aseguró que “se están violando las garantías constitucionales de los acusados porque se cumple lo que reprochamos y es el fundamento que estén integrando este tribunal y valoren elementos de prueba que ya fueron conocidos por ustedes en el juicio anterior”.
El letrado remarcó que “el presente planteo se fundamenta en que la sentencia absolutoria son los pilares probatorios fundamentales de la fiscalía”.
A este planteo se sumaron las defensas de otros acusados, por lo tanto los jueces resolvieron pasar a un cuarto intermedio para resolver la cuestión.
Por su parte, la fiscal María Eugenia Iribarren, habló con la prensa para brindar detalles de lo acontecido en la primera parte de la jornada, que se interrumpió por un cuarto intermedio de 45 minutos establecido por el tribunal.
Iribarren dijo que “como primer planteo la defensa recusó al tribunal y es una situación que podíamos prever o anticipar”.
Asimismo remarcó que “la fiscalía trae a juicio un caso en el que el objeto es probar que este grupo de personas, junto a otras que ya están condenadas, integraban una asociación ilícita y se viene a probar la responsabilidad de cada uno de los imputados, de quienes lideraban e integraban como testaferros y en distintos roles. Además de la responsabilidad que han tenido en cinco muertes”.
Respecto de la recusación señaló que “la resuelve directamente el tribunal, porque se le cuestiona la imparcialidad”.
En relación a la negociación que se llevó adelante para que los acusados ingresen a la sala de audiencia, Iribarren manifestó que “hubo una conversación con los abogados, los fiscales y el tribunal. También respecto del Servicio Penitenciario porque hubo algunas desinteligencias”.
“Traer a los imputados a este nuevo edificio implicó una logística importante e implico situaciones que hubo que coordinar opero los problemas se fueron zanjando”, señaló Iribarren.
En cuanto al habeas corpus presentado por la defensa por las condiciones de detención de los imputados, la fiscal dijo que “se resolvió informalmente pero se sigue tramitando, por las condiciones que la fiscalía y el tribunal no pueden contestar porque no tienen conocimiento”.
“Lo que se concluyó es que este fin de semana van a volver a sus lugares de detención donde estaban, hasta que se pueda constatar por parte del tribunal cuáles son las condiciones, ya que hay detenidos que tienen problemas de salud”, añadió la fiscal.
En relación al pedido de los detenidos de volver por la noche a sus lugares de detención, la fiscal advirtió que “eso se va a resolver al finalizar la audiencia de hoy”, pero a la vez recordó que “esto no estaba previsto y hay que evaluar las condiciones de seguridad para el traslado”. Además añadió que el lugar destinado para los detenidos “no está preparado para un alojamiento permanente, sino transitorio”.
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