Los abogados defensores de tres de los imputados en el juicio por delitos de lesa humanidad por el secuestro y asesinato de los militantes peronistas Osvaldo Cambiaso y Eduardo Pereyra Rossi, perpetrados sobre el final de la última dictadura cívico-militar, pidieron la absolución de sus defendidos durante los alegatos finales.

En el juicio oral, que lleva adelante el Tribunal Oral Federal 2 de Rosario, están imputados once militares, policías y Personal Civil de Inteligencia retirados, entre los que se destacan el último presidente de facto, Reynaldo Bignone y el ex comisario bonaerense Luis Abelardo Patti.

El defensor Julio Agnoli, representante del ex suboficial de la policía bonaerense Luis Amadeo Spataro, pidió la absolución de su defendido al considerar que no existen pruebas que lo incriminen.

De acuerdo a la acusación, Cambiaso y Pereyra Rossi, que militaban en la corriente peronista Intransigencia y Movilización sobre el final de la dictadura, fueron secuestrados el 14 de mayo de 1983 de un bar de Rosario por una patota del Destacamento de Inteligencia 121 y, tras ser torturados en un galón de las afueras de esta ciudad, fueron entregados a una patrulla de la Policía bonaerense encabezada por Patti, la cual los habría fusilado.

El abogado Agnoli sostuvo en base a una serie de testimonios y pruebas producidas durante el debate oral que no hay señalamientos concretos contra Spataro, uno de los dos suboficiales del Comando Radioeléctrico de Tigre que acompañaba a Patti el día de los hechos.

Recordó que «no tenía antecedentes» y calificó a su defendido como «un cuatro de copas».

Por su parte, el abogado Gonzalo Miño, representante del ex personal civil de inteligencia Carlos Sfulcini, también pidió la absolución e introdujo conceptos políticos sobre los juicios por delitos de lesa humanidad.

Planteó que Sfulcini estaba de licencia en el Destacamento de Inteligencia 121 al momento de los hechos y que sólo realizaba tareas como abogado en trámites concernientes con soldados que habían participado de la Guerra de Malvinas.

«Lo acusan de formar parte de la ‘patota’, del ‘grupo operativo’, pero la imputación carece de sustento probatorio alguno», dijo Miño.

A su turno Gerardo Ibáñez, defensor del ex jefe del Departamento III de Operaciones del Comando del II Cuerpo del Ejército, Rodolfo Rodríguez, también solicitó la absolución del militar retirado.

Según dispusieron los jueces, las audiencias continuarán el próximo miércoles con los alegatos de los restantes defensores.