Tres chicas y un muchacho, todos menores de 22, pasaron la noche en una comisaría luego de intentar irrumpir en la quinta presidencial, en Los Abrojos.

El hecho ocurrió este domingo por la mañana, cuando los cuatro jóvenes salieron de una fiesta y no tuvieron mejor idea que tratar de franquear la entrada donde el presidente Mauricio Macri descansaba con su familia. Tras intentar escapar fueron detenidos a pocas cuadras de allí por los oficiales de la custodia presidencial.

A bordo de un Volkswagen Gol, los cuatros jóvenes intentaron llegaron hasta la puerta y se presentaron como familiares del Presidente. Una de las chicas dijo ser la ahijada y otra aludió ser invitada de Juliana Awada. Mientras los encargados de la seguridad presidencial empezaron a chequear la lista de invitados, los jóvenes, desde el auto empezaron a gritar e insultar al presidente Mauricio Macri mientras filmaban y tomaban fotografías de todo, según informaron fuentes oficiales.

Luego de esto, el vehículo se dio a la fuga, pero los jóvenes fueron encontrados y detenidos poco después en un local de Mc Donald, en San Miguel.

Las fuentes policiales informaron que habían salido de una fiesta en el Club Universitario de Buenos Aires y que se trata de cuatro jóvenes, amigos entre sí, que viven en unas de las zonas más exclusivas de Buenos Aires y que pertenecen a familias de la alta sociedad. Los detenidos son Federica López Brown, de 21 años de edad, Federica Albisu, 22 años, Juana Ávalos y Mateo Parisseu, ambos de 21.

Todos quedaron detenidos y fueron puestos en libertad este lunes por la mañana, aunque el auto y los teléfonos móviles fueron incautados por la policía. La causa la investiga el juez Juan Manuel Culotta.

Desde el Ministerio de Seguridad y el entorno presidencial le bajaron el tono al episodio, y negaron todo tipo de vinculación con los hechos ocurridos en el cementerio de Recoleta y en el juzgado de Bonadío. Según publicó el diario La Nación, los voceros presidenciales le restaron importancia y afirmaron: «No pasó nada, eran pibes que querían hacer una broma, el presidente ni se enteró».